La ministra de Salud, Ariana Campero, es el blanco de burlas y de comentarios subidos de tono de algunos miembros del Gobierno. El último ha sido el presidente Morales, quien inexplicablemente dijo en un acto público en Trinidad: «Beni es tan grande, hay que planificar ministra de Salud, ahí inaugurando, no quiero pensar que es lesbiana».
Esto ocurrió algunas semanas después de que el vicepresidente García Linera le expresara que antes de tener un hijo debe casarse porque hombre es hombre» y que luego la puede dejar con «la pruebita de amor colgando». Hace unos meses, en Yacuiba, el candidato a alcalde por el MAS, Carlos Brú le pidió a Campero que se quede en esa ciudad “cama adentro, patrón encima”. Hasta ahora es el único que se ha disculpado, pero queda claro que la joven dignataria es víctima de bullying, tal vez por su corta edad o quién sabe por qué motivo. Campero tiene 29 años, se graduó en tiempo récord y con buenas notas en la Escuela Latinoamericana de Medicina de La Habana en Cuba y tres años después fue posesionada como viceministra.
Es la sucesora de Juan Carlos Calvimontes, un médico al que le tomó 27 años graduarse y que reveló la grave enfermedad que padece el exmagistrado Gualberto Cusi. Nadie en el gobierno le hacía bullying a este personaje, más bien trataron de premiarlo con un nuevo cargo.
Fuente: eldia.com.bo