[vid url=http://cd1.eju.tv/video/1406/PB1601110753.mp4]
Manfred Reyes Villa*A punto de cumplirse nueve años del “enero negro” en Cochabamba, el ex prefecto de ese departamento, Manfred Reyes Villa, da su visión de lo sucedido desde el exilio y homenajea a Cristian UrrestiEsta es una fecha nefasta en la historia de Cochabamba, el 11 de Enero del 2007. Se mostró la intolerancia con la que asumieron el control del país quienes hoy lo gobiernan, empezó entonces a claudicar ese preciado don de la democracia, la libertad de expresión. Todo aquel que piensa diferente a los mandamases esta condenado a ser tildado de derechista, inconsecuente, vocero del pasado o finalmente conspirador.Es mucho tiempo que como muy pocas veces en la historia de nuestro país y a nombre de falsas ideologías y creencias se tiene sojuzgado a todo un pueblo bajo intimidación, amedrentamiento y manejo arbitrario de la justicia, esa justicia que ha permitido el alejamiento de muchos políticos interesados en el progreso de nuestro país, varios fallecidos a causa de múltiples juicios iniciados a sus personas como el caso del Ilustre José Maria Bakovic o políticos como Guillermo Fortún o Fernando Kieffer, otros en prisión preventiva como el caso de Leopoldo Fernandez y miles más en el exilio forzado.En contraposición cientos sino miles de millones de dolares a cuentas personales malgastados en posesiones, matrimonios y fiestas de los gobernantes provenientes del Fondo Indígena que hoy por hoy a nombre de investigación se deja pasar castigando a quienes probablemente son parte del hilo más delgado en esa corrupción salvando a los verdaderos responsables de tamaña iniquidad.Con tanto cinismo escuchamos declaraciones desesperadas del vicepresidente al pedir el voto por el si en el próximo referéndum del 21 de febrero cuando pregunta a un campesino si alguna vez en el pasado recibió vivienda de manos del gobierno omitiendo decir que gracias a la nueva ley de hidrocarburos promulgada por Hormando Vaca Diez el país recibió siete veces más de renta por el gas, de 800 a 5600 millones de dolares y que lamentablemente gastaron los masistas en aviones y helicópteros de lujo, movilidades blindadas un nuevo palacio de gobierno y naturalmente en las grandes estafas como papelbol o barcazas chinas, fabrica de Urea en lugar muy difícil para su exportación , aeropuerto internacional en zona altamente sospechosa de narcotráfico y escasa en habitantes para una obra de esa envergadura y otras muchas incongruencias mas cuando probablemente sus únicas obras fueron unas viviendas ya que canchitas de césped sintético y otras obras menores fueron donadas por Venezuela. Caminos y otras mayores recibieron como herencia de gestiones anteriores.Hoy también recordamos los 9 años en que fue Asesinado Cristian Urresti, un joven cochabambino victimado por golpes y palos al tratar de defender a su padre en los luctuosos acontecimientos del 2007 cuando hordas cocaleras a instrucción del gobierno masista y dirigidas por su ministro de la presidencia pretendieron derrocar al prefecto Manfred Reyes Villa electo por su pueblo.También debemos recordar al campesino Ticacolque fallecido por un disparo aunque las circunstancias de esa muerte aún son dudosas ya que versiones refieren habría sido impactado por el proyectil luego de estar ya en la morgue.Igualmente rindo homenaje a los cientos de heridos y golpeados por la intolerancia de un régimen que no admite pensar diferente, que esgrime «riesgo en la libertad de expresión» sólo cuando le reducen el tiempo de autoalabanzas pero es gran pecado contra el mundo y la humanidad cuando se hacen críticas a su absolutismo.Invadieron Cochabamba, quemaron la Prefectura acción de la que fui victima y aun creyendo en la inocencia de los gobernantes acudí a una cita propuesta por el entonces ministro de la presidencia en un domicilio particular el cuál estaba siendo rodeado por cocaleros y al percatarse de la situación mis ayudantes me sacaron a minutos de producirse la intervención de aquellos. Uno de ellos confesó a mi ayudante que las órdenes eran de golpear suavemente al ministro pero linchar con palos y piedras al prefecto, saquearon negocios, golpearon hirieron a la población sin discriminar a mujeres y niños, mostraron un salvajismo intolerable y todo a nombre de su proceso absolutista que hoy en manos de los bolivianos salvo fraude que puede ser consumado en manos de su dependiente Órgano electoral, puede llegar a su fin el 21 de febrero del presente año.En estos días salió a luz un testigo, tal vez aunque tarde, el más importante a esos acontecimientos por su credibilidad, el arzobispo Solari que en su autobiografía relata parte de los hechos de entonces y como era de esperarse no solo lo llamaron mentiroso, lo mandaron a escuchar al papa Francisco.Cristian Urresti, no olvidamos tu coraje y valentía, la justicia tarda pero llega, paz en tu tumba y oramos por que la resignación llegue al corazón de tus familiares.*Fue alcalde de la ciudad de Cochabamba, prefecto del departamento del mismo nombre y candidato a la presidencia de la república de Bolivia