El músico británico David Bowie, quien falleció el pasado 10 de enero en Nueva York después de perder una batalla secreta contra el cáncer, dejó bienes por un valor cercano a los USD 100 millones.
En las últimas horas se dio a conocer que destinó un millón de dólares a la niñera escocesa que se convirtió en una segunda madre para su hijo, Duncan «Zowie» Jones, fruto de su relación con su primer mujer, Angie Bowie.
En su testamento, el músico de 69 años reconocía el papel que Marion Skene jugó en la crianza de Duncan.
Bowie llegó a considerar a Schwab como su mejor amiga y le atribuyó haberle salvado la vida. Su estrecha relación dio lugar a la especulación de que eran amantes.
De acuerdo al tabloide inglés Daily Mail, el músico también le dejó casi USD 2 millones a su ex asistente, Corinne ‘Coco’ Schwab, quien trabajó con él durante más de 40 años.
En tanto, la mitad del patrimonio va a su esposa Iman, quien también se quedará con la vivienda que compartía con el artista en Nueva York, y el resto se divide entre Alexandria, de 15 años, y Duncan, de 44.
Se conoció además durante la lectura del testamento el sábado en Nueva York que su último deseo fue que sus cenizas sean esparcidas en la isla de Bali, en medio de un ritual budista.
Solo dos días antes de su muerte, la leyenda la música había lanzado su último álbum llamado «Blackstar», que actualmente ocupa los primeros puestos en ventas en Reino Unido y los Estados Unidos.
Fuente: infobae.com