Sixto Nolasco: “Bolivia puso cemento en mi corazón”

El dominicano se confiesa con EL DEBER. Dejó la Red Uno después de siete años. Por primera vez habla de su relación amorosa. Sueña con ser ministro de Turismo. No se callaCondujo No somos ángeles, Pura vida y Bailando por un sueño (f). Fueron siete años en un solo canal, Red UnoCondujo No somos ángeles, Pura vida y Bailando por un sueño (f). Fueron siete años en un solo canal, Red UnoEl Deber / Santa CruzOtro Sixto. Eso es lo que dice ser el dominicano que armó revuelo en Bolivia cuando llegó a Santa Cruz directo de Miami y se atrevió a indicar que las nalgas de las divas Carla Morón y Verónica Larrieu eran flácidas.De eso ya pasaron más de 10 años. Desde el 29 de enero de 2009, cuando se mudó con Dior (su perrito) a la urbe cruceña y, hasta ahora, Bolivia le mostró otra realidad a la que él no estaba acostumbrado. “Me abrió los ojos. Me enseñó lo que es la traición”, subraya. Asegura que su exnovio, una señora, un periodista y mucha gente lo hicieron sucumbir hasta el suelo, pero no guarda rencor.“Amo a mis padres, pero no me enseñaron a pelear (por lo mío). Ellos tienen la culpa (de mis problemas)”, parafrasea entre lágrimas.Declarado gay abiertamente y siempre polémico, el multifacético caribeño, que conoce unos 12 países y que trabajó en Univisión y Telemundo, dejó la Red Uno después de siete años y, a pesar de estar deprimido, no se va a dejar vencer.Baraja muchas actividades y ya que no puede ser presidente de Bolivia, buscará ser ministro de Turismo.Fue uno de los conductores de tres programas exitosos: No somos ángeles, Pura vida y Bailando por un sueño. Organizó dos versiones del Misión moda y, según él, tiene 45 años, pero cuando dice su edad pone su cara de pícaro y sonríe. Ahora, mira pa’lante, pa’lante y durante casi 60 minutos se confiesa.¿Después de siete años, por qué ya no estás en la Red Uno?Estoy agradecido con Hans Cáceres (el productor), pero no sé qué está pasando en los canales de TV… Dan pasos extraños y cambian a su personal sin respetar la trayectoria que tengás.No quiero decir que soy el mejor fashionista del mundo, pero tengo más de 20 años en el mercado para que me desechen. Estaba muy bien en Pura vida, un programa muy chévere, pero lo cerraron y sucedió lo mismo con Bailando por un sueño.Mi salida de la Red Uno me dolió. Supuestamente no había presupuesto para mí. A los ejecutivos del canal les dije: “Dejé mi país y mi familia y me convertí en una persona naranja”.Cuando vine la primera vez de Miami todos me invitaban a los canales, pero una vez que entré a la Red Uno, Unitel y PAT me vetaron. Pero todas mis actividades, como el evento del cáncer de mama, no tienen ningún color televisivo.¿En vez de ser naranja no pudiste ser rojo, amarillo, verde?Soy, quizá, el extranjero más boliviano que podés encontrar. Amo Bolivia. El colla odia al camba y el camba odia al colla, pero yo amo a los dos. Soy tricolor, pero la gente me encasilló en un solo canal de TV.Todos tenemos ciclos, pero también hay cosas que no dependen de vos.¿Ya no va más la era Sixto Nolasco? ¿Se acabó tu ciclo? Lo acabaron.¿Quién lo acabó?No lo sé, alguien tuvo que ser. El problema fue que no había la plata para el sueldo que les pedía, pero todo se pudo haber conversado. Lo que ganaba en Pura vida no era ni la sombra de lo de Bailando por un sueño. Quizá entré a este país por la puerta equivocada, porque lo hice con No somos ángeles.Quizá los siete años en Bolivia jamás debieron existir…¡No! ¡Para nada! Estos siete años me sacaron del cascarón en que estaba cuando vivía en Miami. En Bolivia aprendí lo que es la traición. La primera fue la de C. D., que fue como un puñal en la espalda.La segunda, de una señora que me demandó por una supuesta discriminación en Misión moda. Las dos fueron quilombazos. Pasé cosas horrendas en este país, pero estoy agradecido por eso. Antes era una celebridad, viajaba en primera clase, mi vida era púrpura, pero todo eso cambió en Bolivia.¿Aprendiste la lección?Mucho. Aprendí a ser más duro de corazón, pero no me gusta porque soy humano y lloro de cualquier cosa. Bolivia me puso cemento en el corazón, pero también me abrió los ojos.Han dicho todo de mí. El boliviano bueno es muy bueno y el boliviano malo es muy malo. Llegué al país y un periodista hizo fiesta con mi nombre ¡Me acabaron! ¡Qué fuerte!El argentino Mariano de la Canal retornó a Cantando por un sueño, ¿qué opinás?Me dan ganas de llorar. A mí me explicaron que no iba a haber nadie del Bailando, porque nadie canta, pero no fue así. Trajeron a Mariano de la Canal y él hizo fiesta conmigo. ¿Qué aportará él?, ¿más escándalos?, ¿seguirá insultando a los bolivianos? ¿Es cierto que tuviste una relación seria con un boliviano?Sí, tuve una relación de casi dos años donde me enamoré perdidamente, pero él no de mí. El dinero pudo más que la pasión.Él me ha hecho como tres demandas porque, supuestamente, yo no le di el dinero que le correspondía del negocio que teníamos juntos. Me quitó mi carro y fue muy malo. Ya lo perdoné ante Dios y estoy tranquilo.¿Cómo es que todo el tiempo caés y te levantás tan rápido? ¿Cuál es tu clave?Seré muy gay, me pintaré las uñas de negro, me pondré aros, lo que vos querrás, pero tengo a Dios en mi corazón.Amo a mis padres, pero no me enseñaron a pelear (por lo mío). Ellos tienen la culpa (de mis problemas). La gente está conmigo por mi trabajo, no porque me acuesto con ellos.¿Qué harás ahora?Estoy con mi productora. Organizo eventos y sigo haciendo cambios de look. Trabajo con Gloria Limpias (Promociones Gloria) y estoy en negociaciones para volver a montar el Míster Bolivia. ¡Moriría por eso!He amado y vendido tanto a este país que algún día desearía ser ministro de Turismo. Nunca podré ser presidente, pero sí ministro, cónsul, concejal o alcalde. Como ministro vendería al país como nunca.