Choque: Mi labor era conocida en el Ministerio de la Presidencia
La exdirectora de la Unidad de Gestión Social del Ministerio de la Presidencia Cristina Choque, ahora detenida por el caso CAMC, afirmó que vive una “situación injusta”, debido a que en esa cartera de Estado conocían todas las actividades que desarrollaba en esa entidad.
Tras 10 días como interna del Centro de Orientación Femenina (COF) de Obrajes, en la zona Sur de La Paz, afirmó que alista “con calma” su defensa judicial porque está segura de que demostrará su inocencia en los tribunales y rebatirá los argumentos de la Fiscalía, que la imputó por los delitos de incumplimiento de deberes, uso indebido de influencias y uso indebido de bienes del Estado.
Contactado por teléfono por La Razón, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, indicó que no puede responder a Choque a través de los medios de comunicación, que el caso no puede ser ventilado a través de este canal, y que la exfuncionaria detenida debe responder ante la Fiscalía, que es la encargada del caso.
“Nos dedicábamos a realizar labores de asistencia social, en mis oficinas no se firmaban contratos ni había relación con empresarios (…). El Ministerio de la Presidencia tenía conocimiento de todas las actividades que hacía en la Unidad de Gestión Social”, afirmó Cristina Choque
Proceso. Según la investigación preliminar, a Choque se la acusa de facilitar ambientes de ese despacho, ubicadas en la avenida Arce de la ciudad de La Paz, para que Gabriela Zapata, entonces gerente de la firma china CAMC y expareja de Evo Morales, gestione contratos entre empresarios y el Estado, haciéndose pasar por funcionaria del Gobierno.
El 1 de marzo, en declaraciones a la emisora estatal Patria Nueva, Quintana afirmó que desde fines de 2015 el Gobierno investigó el hecho para desvirtuar un posible tráfico de influencias, por la relación que hubo entre Zapata y Morales.
“Hemos concluido con una investigación respecto al papel de la señora Cristina Choque, jefa de la Unidad de Gestión Social, en cuyas oficinas se llevaban adelante reuniones de naturaleza privada para favorecer a terceros”, sostuvo en la oportunidad.
A ello se sumó el informe del fiscal general, Ramiro Guerrero, quien señaló que Zapata ingresó más de 40 veces a la Unidad de Gestión Social como si fueran sus oficinas. El 2 de marzo, Choque se presentó a su audiencia cautelar para prestar sus declaraciones y se determinó su detención preventiva. “Mi situación es injusta. La Justicia ha sido muy rápida en mi caso, en comparación con otros casos mucho más graves”, expresó ayer, desde el COF.
“Mi labor era dar asistencia en salud y educación, además de apoyo a familias pobres. Llevábamos alimentos a albergues que dependen de la Gobernación de La Paz, de Oruro, a la Alcaldía de El Alto y a Régimen Penitenciario”, detalló a La Razón.
Agregó que la única relación con Zapata era de compañera del partido en el Movimiento Al Socialismo (MAS), desde 2005 en Cochabamba, y que su amistad fue creciendo con los años. “A eso se limitaba mi relación; en mi posición, yo no podía tomar decisiones sobre contratos, yo hacía gestión social y eso lo sabía el Ministerio de la Presidencia”, insistió.
Con todo, Choque guarda detención preventiva junto a Zapata en el COF, luego de que el 28 de febrero también fue remitida a ese penal, acusada por enriquecimiento ilícito, enriquecimiento de particulares con afectación al Estado y uso indebido de influencias, en grado de complicidad. La relación de Zapata y Morales salió a la luz pública el 3 de febrero, cuando el presentador Carlos Valverde reveló aquélla y la existencia de un hijo, y denunció tráfico de influencias.
Es acusada de cometer 3 delitos
Imputada
El 2 de marzo, Cristina Choque fue enviada al Centro de Orientación Femenina (COF) de Obrajes acusada de incumplimiento de deberes, uso indebido de influencias y uso indebido de bienes del Estado.
Apoyo
Según la indagación del Ministerio Público, Choque facilitó ambientes y un vehículo a Gabriela Zapata, expareja del presidente Evo Morales, para gestionar la firma de contratos “en favor de terceros”. El fiscal general del Estado, Ramiro Guerrero, aseguró que en más de 40 oportunidades, Zapata estuvo en oficinas de la Unidad de Gestión Social.
‘Me han dado una muerte civil’
La exresponsable de la Unidad de Gestión Social del Ministerio de la Presidencia, Cristina Choque, afirmó que su detención preventiva en el Centro de Orientación Femenina (COF) de Obrajes no solo afectó su vida familiar, sino también su trayectoria profesional y de activista política del Movimiento Al Socialismo (MAS), partido en el cual milita desde 2002, cuando tenía 18 años.
“Soy licenciada en Ciencias Políticas de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) de Cochabamba y soy parte del MAS desde que tengo 18 años. Ahora, con este proceso, perdí mi trabajo y toda mi vida política. Me han dado una muerte civil”, afirmó Choque, quien guarda detención preventiva sindicada por tres delitos, tras ser relacionada con Gabriela Zapata, acusada por gestionar contratos entre el Estado y CAMC en las oficinas de la Unidad de Gestión Social de la Presidencia.
Investigación. Relató que sus padres, en el Chapare, fueron “gente de base” que contribuyó en la construcción del instrumento político y que de ahí surgió su afinidad política con el partido de Gobierno. “Después de toda esa trayectoria estoy aquí. Cada día, mi pena es muy grande; tengo una hija de tres años a la que ya no puedo ver y una pequeña de seis meses que a diario me la traen para amamantarla. Vulneraron también ese derecho porque por mi beba tengo inamovilidad laboral por un año”, dijo.
El 22 de febrero, la Unidad de Gestión Jurídica le inició un proceso administrativo a Choque por “mal uso de bienes del Estado”. La investigación, tras 30 días, debía emitir un fallo sobre su culpabilidad o no y así remitir el caso a la Justicia, pero el 2 de marzo la Fiscalía solicitó su detención.