Arturo Yañez CortesAl Vice y a sus muchach@s se les está cayendo la baba para nombrar lo más rápido posible a su nuevo Defensor “del Pueblo” y como no podía ser de otra manera –no se puede con el carácter che- ya están metiéndole no más el iter criminis de una nueva estrategia envolvente, para asegurar el nombramiento de algún oficialista como defensor… del régimen.Pero como no hay crimen perfecto, lo primero que al ciudadano libre pensante le ofende es el apuro que tienen en este caso, si se recuerda que desde hace prácticamente una década, existen más de una veintena de groseros interinatos de altos cargos de la estructura del estado. Por ejemplo, el diputado del MAS disfrazado de Contralor interino, ha cumplido 8 años en ese cargo, cuando hasta para el caso que fuera titular, su lapso máximo de función era de 6…Por cierto que las razones del inusitado apuro oficialista, tienen que ver con que el actual Defensor -electo también por el oficialismo y sus aliados de entonces- les salió contestón y terminó levantando la cabeza en el mar de genuflexos amarrawatos que tienen muy mal acostumbrado al stablishment azul. El Lic. Villena tuvo intervenciones destacadas (no acompañadas por la mayoría de sus representantes departamentales), resaltando los casos Chaparina u otros.En vísperas de producirse la acostumbrada levantada de manos en la Asamblea Legislativa, está instalado el debate sobre los requisitos que debiera cumplir el nuevo funcionario, fundamentalmente si debiera o no tener un grado universitario básico (por lo menos… digo yo).Sostengo que se trata de una maniobra distractiva, orientada a encubrir las verdaderas intenciones del oficialismo: tener un defensor del régimen y no del pueblo. Y como ante la confesión hay relevo de pruebas, recuerden que precisamente el mismísimo Vice al posesionar al actual Defensor -13 de mayo de 2010- instó al Lic. Villena a no cumplir su función universalmente aceptada, sino a defender al estado y el Presidente, en el mismo acto hasta llegó a decirle que defienda al ejecutivo en sus acciones, ya que según él: “el pueblo está en el Gobierno”. Toda una clase de lo que NO es precisamente el Ombudsman.Como se comprueba cotidianamente con el vergonzoso desempeño de varios “profesionales”, que sólo se ocupan de amarrar los watos de su jefazo, los estudios universitarios no garantizan por sí mismos la idoneidad en el desempeño de una función, aunque al menos en teoría, debieran otorgar aptitud técnica para su desempeño.Creo que lo relevante fuera que el nuevo funcionario sea realmente independiente del poder partidario y por tanto, pueda cumplir con la esencia universal del instituto del Ombudsman que es precisamente defender al ciudadano de los abusos del poder público, el que esta encarnado en cualquier gobierno y la administración pública y, por tanto no hacerse al gil con los sistemáticos abusos que aquellos cometen a diario con la persona. A propósito, habría que considerar aquello de Terek Bok: “Si cree que la educación es cara, pruebe con la ignorancia” y, como a diario lo soportamos con vergüenza ajena, con la ignorancia no nos está yendo muy bien que digamos…El Día – Santa Cruz