La Federación Campesina de Mujeres del Trópico de Cochabamba ha informado que el Gobierno le acaba de otorgar la autorización para que mil productores adicionales puedan tramitar sus licencias de comercialización de coca, con el objetivo de expandir el mercado de la hoja del Chapare al país.
Esta noticia puede sonar muy extraña, pues supuestamente la meta es combatir la coca excedentaria, localizada fundamentalmente en tierras chapareñas, que dedican más del 90 por ciento de la cosecha de coca al narcotráfico. Aunque la intención pueda ser otra, la verdad es que la multiplicación de los vendedores automáticamente generará un incentivo para el aumento del cultivo y obviamente la masificación de los cocaleros, la fuerza más importante que tiene el Gobierno, cuya credibilidad marcha en declive.
La reciente noticia tiene más lógica ahora que los despidos andan a la orden del día y el régimen tiene que ofrecer algún tipo de alternativa. El Chapare fue precisamente la salvación que surgió en los 80 para muchos relocalizados de las minas, de donde surgió el liderazgo que hoy controla el país. En ese sentido, lo que se hace ahora es muy “visionario”.
Fuente: eldia.com.bo