Productores. Pese a los perjuicios ocasionados, el sector garantizó la producción para el abastecimiento interno del país
Ref. Fotografia: Productores. Debieron buscar refinanciamiento para continuar la campaña de verano de este año.
Según un informe del Colegio de Ingenieros Agrónomos de Santa Cruz, el impacto de la sequía durante el invierno del 2016 causó una pérdida económica de 206.636.852 millones de dólares, afectando principalmente a los cultivos de soya, trigo, girasol, maíz, sorgo y chía, con niveles bajos de rendimiento.
Agricultores endeudados. Jaime Hernández, gerente de Planificación de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) explicó que al haber una millonaria pérdida económica muchos pequeños agricultores se vieron imposibilitados de cubrir los créditos a los proveedores de insumos, debiendo en muchos casos hacer una refinanciación para continuar produciendo, puesto que el Gobierno no dio oído al pedido de habilitar un punto de reactivación que permita a los agricultores acceder a estos recursos a medianos y largo plazo.
«Pese a ello, el agricultor tiene que seguir produciendo y en muchos casos se hizo una refinanciación con los mismos proveedores, que los coloca en endeudamiento y que en caso de tener una nueva pérdida extrema la situación se agravaría», dijo Hernández.
Garantizan abastecimiento. Para este año la campaña de verano ha logrado cumplir las expectativas de siembra, teniendo al momento cerca de un millón de hectáreas (ha) sembradas en soya, cien mil ha en maíz, y 50 mil ha en sorgo, esperando durante la cosecha alcanzar los niveles de producción esperados que permitirán no solo garantizar el abastecimiento del mercado interno, sino también contar con excedentes para la exportación.