Kataris 26 luchan contra el cártel Santa Blanca en juego cuestionado por Bolivia

El líder de los rebeldes es Pac Katari, un luchador “que cree en la fuerza de la naturaleza y en el equilibrio entre el bien y el mal”.En el videojuego también se observan zonas tropicales.En Tom Clancy’s Ghost Recon Wildlands se muestra a una Bolivia en la que reina  el cártel  Santa Blanca, que procede de México, según el artículo «La guerra entre facciones de Ghost Recon Wildlands”, que está colgado en la web oficial.La trama del videojuego  comienza cuando  ese cártel  llega a Bolivia. Al comienzo se cuenta que el  grupo criminal  «envió a sus sicarios para que los cocaleros se unieran a la causa mediante asesinatos e intimidaciones”. Muchos de los productores   de coca «se asustaron y se doblegaron ante Santa Blanca”.No obstante, emergió un conjunto pequeño  de cocaleros que decidieron defenderse. «Más bolivianos se unieron a ellos y los Kataris 26 establecieron campamentos en las provincias de Itacua y Banegas”, dice la nota.El caudillo KatariEl líder de los Kataris es Pac Katari (cuyo nombre real es Ramiro Apaza Nieves), un caudillo carismático que lidera  la lucha que mantienen los rebeldes contra el  cártel, entidad que buscan expulsarlos del país con el objetivo de  conseguir que la producción de coca vuelva a manos de los cocaleros.  Los Katari 26 también pretenden «derrocar al gobierno corrupto que está representado por la Unidad en todo el país”.La «Unidad” es un grupo militar que está formado por  «los agentes más fuertes y agresivos del ejército de Bolivia”. El objetivo con el que nació este grupo fue «deshacerse” de Santa Blanca. No obstante,  acabó corrompiéndose y se alió al cártel.»La Unidad multiplicó el grado de violencia por todo el país; sus operaciones convirtieron poblados en zonas guerra. Provincias enteras quedaron arrasadas y se sembró el caos”, dice el artículo referido.Un equipo de EEUUEse es el escenario en que actúan los «ghosts”, que es un equipo legendario de operaciones especiales de élite de Estados Unidos, quienes buscan  «sembrar el caos” con el fin de «desestabilizar y quebrantar la alianza entre el cártel de Santa Blanca y el gobierno”.Los ghosts llegaron  a la Bolivia del juego  de incógnitos, «sin el apoyo oficial del gobierno estadounidense”. «A ojos del mundo, no existen. Sin embargo, fueron entrenados para llevar a cabo operaciones encubiertas y son capaces de actuar en zonas extremadamente hostiles”, dice su descripción oficial.»En el juego, los ghosts pueden ayudar a fortalecer a los Kataris 26 ofreciéndoles recursos, liberando rebeldes encarcelados o completando las misiones secundarias de operaciones rebeldes”, dice el portal del juego.Página Siete  / La Paz