Ven que Bolivia busca seguir una línea política en la ONU

  • El embajador de Bolivia en la Organización de Naciones Unidas, Sacha Llorenti. | ONU

Expertos en derecho internacional consideran que la decisión que tomó Bolivia el pasado martes ante el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) fue para demostrar su “alineación” política internacional en relación a los bloques que se conforman en esa instancia.Sin embargo, se ve también contradicciones pese al justificativo del Gobierno considerando que Bolivia es parte y preside el Comité de No Proliferación de Armas en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).Francia, Inglaterra y Estados Unidos propusieron sancionar a Siria por su vinculación con ataques químicos contra civiles confirmados por un equipo especial de investigación vinculado a la ONU. Sin embargo, Rusia y China vetaron el documento, y Bolivia votó en contra, respaldando el veto.Mediante un comunicado, Bolivia calificó la propuesta -que no fue consensuada- como un “intento de instrumentalización política”; pero además, ponía en riesgo el cese de fuego que inició en diciembre de 2016. El presidente Evo Morales defendió la posición y saludo, mediante su cuenta de Twitter, la decisión de los miembros del Consejo de Seguridad “que evitaron su politización y allanaron el camino a la paz en Siria”.El docente en derecho internacional de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), Sergio Castro, señaló que la decisión que toma Bolivia no afecta drásticamente lo que pasa en el Consejo de Seguridad porque no es un miembro permanente como lo son: Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y China. Sin embargo, dijo que “en el Consejo de Seguridad siempre hay posiciones, el consejo siempre ha tratado de ser neutral para evitar conflictos pero resulta que notoriamente hay este problema de las posiciones”.Explicó que con el advenimiento de Donald Trump como presidente de Estados Unidos (EEUU) y la posición “dura” de Vladímir Putin en la presidencia de Rusia, las diferencias que existían se ven mas marcadas, por lo que ahora “después de mucho tiempo estamos encontrando esa bipolaridad entre un lado de Rusia y China -los más fuertes- y el lado de los gringos”.Lo que ha hecho el embajador de Bolivia en el Consejo de Seguridad, Sacha Llorenti, es “un posicionamiento en el proceso de nueva bipolaridad”. Entonces, “es básicamente un proceso de alineamiento que probablemente tenga problemas frente a la relaciones políticas y comerciales que tenemos con EEUU”.No es cuestión de votosPor su parte, el presidente del Instituto de Estudios Internacional, Óscar Alba, afirmó que la decisión de Bolivia no es relevante en cuestión de votos porque no es un miembro permanente, pero si da legitimidad.Aseguró que las negociaciones de crédito que existe con China y el trabajo que existe con las empresas de ese país; además del centro de investigación nuclear con Rusia, han sido relevantes para que respalde el veto de ambos países a la propuesta de EEUU. “Un voto que tiene una carga de legitimación, o sea, no puede tener efectos legales, pero tiene la tarea de legitimación que es el prestigio del propio Evo Morales”, dijo.Explicó que la decisión es parte de una lógica de “alianzas de utilidades mutuas. Parece que el acercamiento de Bolivia y Rusia es muy fuerte; y con China  ni hablar. Deben estar tratando de triangular por ese lado su posición política internacional”.Dijo que con EEUU “no tenemos relaciones diplomáticas reales, la falta de embajadores nos rompe relaciones pero sí seguramente los otros países (Francia y Reino Unido) deben estar buscando represalias”.Entonces, “el bloque liderado por EEUU va asumir que Bolivia se alineará con China y Rusia y tratará de negociar desde esa posición”.Los Tiempos / July Rojas Medrano