En La Paz el poder político está fragmentado


Una mirada al centro político de Bolivia.Análisis. La hegemonía política del MAS a lo largo de 11 años de gobierno, según expertos, tuvo momentos de quiebre. Desde el referéndum 2011 hay una polarización política.La-Paz-el-poder-politico-esta-fragmentado-La Paz, cuna de la libertad y tumba de tiranos», reza la frase que caracteriza a dicho departamento, cuya sede de gobierno históricamente, concentra el centro del poder político del país. Hoy, cuando celebra nada menos que 208 años de grito libertario, esa premisa parece esfumarse. Políticamente se halla fragmentado por cuatro cabezas, cuyo liderazgo no tiene la hegemonía de otros tiempos y menos de hace al menos siete años atrás, cuando el Movimiento Al Socialismo (MAS), con el liderazgo de Evo Morales, concentraba el poder absoluto.»En realidad lo que hay es, prácticamente una fragmentación política», define el politólogo Carlos Cordero Carrafa, al citar como muestra de dicha afirmación que los grandes municipios están en manos de la oposición, con los alcaldes Luis Revilla en el municipio de La Paz,  Soledad Chapetón en El Alto.   En tanto que Félix Patzi, un exdisidente del MAS, que administra el gobierno departamental con una muy arraigada ligazón en las áreas rurales y la sede de gobierno a la cabeza del presidente Evo Morales.»En ese contexto, esos liderazgos generan tensiones entre ellos y rivalidades inútiles para el interés del ciudadano, donde se vive un clima bastante tenso, como ha sido la semana pasada, con una ciudad bloqueada, que ha debilitado en el último tiempo su peso específico en el contexto nacional de país», argumenta Cordero.En tanto, para el ex vicepresidente de la república, Víctor Hugo Cárdenas, pese a esa situación, La Paz sigue siendo el centro político del país, al constituirse en el espejo de la fragmentación política que se vive en el resto del país. «A lo largo de la historia de Bolivia, La Paz tuvo y tiene una enorme importancia social, política e ideológica», apuntó.Una región que se queda. Marcelo Silva, analista político, refiere que La Paz sigue siendo el referente político del país, incluso aún con mayor énfasis una de sus hijas más jóvenes, como es la ciudad de El Alto.»Ambas ciudades siguen marcando la agenda política nacional. Una por la centralidad del poder que tiene la sede de gobierno y otro por la voz contestataria, incluso ante cualquier gobierno en el poder, que refleja El Alto, con su voz altisonante de la coyuntura sociopolítica del país», argumentó.Pero una de las características que hacen a La Paz en el centro político del país, es la confrontación constante de las fuerzas centrífugas que a diario ponen en vilo la actividad y la vida misma de los paceños.En ese contexto, Silva describe dicho liderazgo político en la hora actual le está significando grandes pérdidas como es el peso específico de la economía del país, la misma que en los últimos años se ha trasladado a otras latitudes del país, en particular al departamento de Santa Cruz.»Pese a ese poder de La Paz,  ha quedado, pero muy relegada en términos de inversión, en temas de producción, de generación de empleo y de actividad económico, e incluso de oferta turística, como fruto del costo de ser como la capital política, como son las constantes movilizaciones, marchas y bloqueos que tienen casi sujeta los 365 días del año», puntualizó.Menos perspectivas. Cordero en contraste a ese contexto sociopolítico, señala que La Paz ha dejado escapar la gran oportunidad de tener el liderazgo nacional. «Lo que ha ocurrido es un crecimiento desigual de una ciudad de El Alto, con altos índices de migración, con grandes índices de informalidad, al que hoy ninguno de los cuatro líderes  hacen frente común», señaló.Sin embargo, remarcó que el poder del centro político del país, solo se reduce en su cualidad de sede de gobierno, donde los dos poderes más importantes del Estado como es la ejecutivo con el gobierno y la Asamblea Legislativa, cuyo entorno concentra poder y fuerte presencia  de otras instancias y organismos internacionales.Evo y Revilla encienden la tradicional tea de MurilloEl presidente Evo Morales y el alcalde de La Paz, Luis Revilla, encendieron ayer la tea de Pedro Domingo Murillo, con lo cual arrancaron los actos cívicos por los 208 años del grito libertario del 16 de julio de 1809.»Esta celebración de los 208 años del grito libertario de 1809, nos encuentra unidos haciendo este homenaje a tan importante hecho histórico para La Paz, para Bolivia y para toda América», dijo Revilla, con el asentimiento del presidente Morales./ABIEvo  Morales Presidente del Estado PlurinacionalEn 11 años de Gobierno, según los analistas, la hegemonía política sobre La Paz, que tenía se quebró a partir del referéndum del 21 de febrero 2016.Félix PatziGobernador del departamento de La PazCon su agrupación política 3er Sistema, se erigió como la máxima autoridad departamental en alianza con Sol.Bo. Ahora su popularidad se reduce más en el área rural que la ciudad de La Paz.Luis RevillaAlcalde de La PazCon la creación de Soberanía y Libertad (Sol.Bo), su liderazgo tuvo eco en la capital paceña, al paso del tiempo, según analista, solo se reduce a segmentos clase medio altos de la ciudad.Soledad ChapetónAlcaldesa de El AltoSu figura emergió de la misma esencia alteña, su popularidad fue minimizada en el último tiempo por la fuerte presencia política del MAS y una confrontación a la que inútilmente ella se afrontó.Punto de vista«La Paz es un departamento sin liderazgo»«La Paz, como centro político del país, hoy se halla fragmentado y polarizado. El MAS en un extremo y en el otro, la gobernación de Patzi, los municipios de Revilla y de Chapetón y, en provincias, alcaldías cooptadas por el oficialismo junto a una inmensa cantidad de indecisos, frustrados por el fracaso del MAS y la incertidumbre de la oposición. La hegemonía absoluta del MAS hasta 2010 y 2011, en ciudades y en provincias, se esfumó.En ese contexto sociopolítico, La Paz puede ser definida como un departamento  sin liderazgo definido en lo estratégico, sin visión a mediano y largo plazo,  pero con una sociedad activa, frustrada, pero que empieza a movilizarse para revertir la parálisis. Un ejemplo notorio fue la movilización popular opositora por el 21 F.Ahora el centralismo tan criticado es ideológico, social, político y económico, aunque en los dos últimos aspectos surgieron, en los últimos años, otros puntos de referencia.El liderazgo político de La Paz, hoy venido a menos, es una combinación de varios factores entre los cuales están gobernantes y fuerzas sociales y culturales, sin embargo, desde otras regiones surgen liderazgos, discursos y fuerzas urgidas de un diálogo e integración regional y nacional democráticas.En cambio los liderazgos políticos y estatales de Patzi, Revilla y Chapetón deben distribuir su tiempo y esfuerzos entre la gestión pública, el trabajo político y la defensa de los permanentes ataques y sabotajes del MAS, en términos financieros, sociales y políticos.Por eso hay un conglomerado multiforme detrás de esos liderazgos pero destacan bolsones rurales en el caso de Patzi, urbano-rurales (El Alto) en Chapetón y urbanos en Revilla.Víctor Hugo CárdenasEx Vicepresidente de  BoliviaFuente: EL DÍA