Flagelo sin fin: Hermanas fueron asesinadas por pugna económica

Cochabamba. La Felcv investiga la masacre como feminicidio por la muerte de Patricia, asesinato por el deceso de Carmen y tentativa de asesinato por el ataque a la sobrina. Otro aspecto que inculpa a la expareja son las amenazas de muerte, la última el martes.

Mataron a hermanas por pugna económica

    • Las dos hermanas fueron atacadas en su casa, cerca del puente Cobija, el jueves presuntamente por la expareja de la menor y dos sicarios por conflictos económicos dentro de un proceso de divorcio. | Los Tiempos

Las hermanas Patricia (43) y Carmen Caballero Ovando (59) fueron masacradas en su casa, ubicada cerca del puente Cobija, la noche del jueves, por la expareja de la primera, Claudio T.R. (46) y dos sicarios, presuntos amigos del principal sospechoso, con 17 y 14 puñadas. Una joven de 23 años, sobrina e hija de las víctimas, sobrevivió al ataque.Las mujeres fueron atacadas en medio de una pelea familiar por los bienes de la pareja por dos encapuchados que las apuñalaron. Carmen, una maestra, salió en defensa de su hermana y falleció cuando recibía atención médica en el hospital.Los vecinos contaron que vieron salir a dos encapuchados y luego escucharon a la hija menor pedir ayuda y llorar, porque mataron a su mamá. La expareja presuntamente abandonó la casa luego del ataque y volvió después de una hora fingiendo que no sabía nada, pero, al verlo, su hija menor se desmayó.La Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv), que aún no reveló la identidad del principal sospechoso, informó ayer que los tres sujetos ingresaron abruptamente a la casa a las 21:00 para cometer el hecho de “violencia extrema”.“Se logró tener la aprehensión de una persona mayor de edad, de 46 años, pareja de una de las occisas, y sobre la cual pesa un grado de responsabilidad considerable de acuerdo a los primeros actuados de orden investigativo”, dijo el director departamental de la Felcv, Iván Luque.El detenido fue aprehendido cuando volvió a la escena del crimen supuestamente al enterarse por la televisión que la casa fue asaltada. Junto con él fue arrestado un sobrino de las víctimas por disposición del fiscal de Distrito, Óscar Vera, quien llegó al lugar de los hechos. El joven fue liberado por falta de pruebas.“Entrevistas a gente aledaña y familiares dan a conocer un marcado interés económico que no sólo involucraría a la familia constituida previamente por la pareja, sino que, además, tendría su implicancia a otro seno familiar”, expresó Luque.La directora de Desarrollo Humano de la Alcaldía, Andrea García, dijo que la víctima inició su divorcio en diciembre y que su pareja tenía un comportamiento violento con ella y sus hijas de 10 y 13 años. Las dos niñas están al cuidado de familiares y bajo la protección de la Defensoría de la Niñez y el Servicio Legal Integral Municipal (Slim).La Felcv investiga la masacre como feminicidio por la muerte de Patricia, asesinato por el deceso de Carmen y tentativa de asesinato por el ataque a la sobrina. Otro aspecto que inculpa a la expareja son las amenazas de muerte, la última el martes.Más muertesEl caso se suma a los otros 10 feminicidios registrados en 2017, donde igualmente los agresores eran cercanos a las víctimas. Desde 2016 hasta el presente, se registraron 37 feminicidios.La asambleísta departamental, Lizeth Beramendi, manifestó: “Nos estamos haciendo personas intolerantes que no tienen capacidad de vivir con una persona que piensa distinto. Esta situación es una llamada de atención para todas las autoridades, pero sobre todo para las instituciones involucradas en la educación”.Expresó su preocupación por el retraso del reglamento de la “Ley integral de lucha contra la violencia hacia la mujer, promulgada hace dos meses”.AGRESORES SON DEL ENTORNOEn Cochabamba, se registraron 26 casos de feminicidio el año pasado, hasta agosto se tenían registrados 15. Este año, suman 11 casos. Según la bases de datos realizada por Cuántas Más, un proyecto que realiza monitoreo y levantamiento de datos sobre los casos de feminicidio en Bolivia, en Cochabamba en 2016, el 53 por ciento de las mujeres asesinadas tenían una edad de entre 21 a 30 años y un 19 por ciento entre 11 a 20 años.Entre otros datos, se muestra que un 88 por ciento fueron asesinadas por personas de su entorno, ya sea familiares o parejas, evidenciando que los hechos de violencia empiezan en los hogares. Mientras que un 12 por ciento fueron asesinadas por desconocidos.Entre las consecuencias de los hechos, un 65 por ciento de las víctimas dejó en orfandad a uno o más niños. Por otro lado, del total de casos de 2016, un 96 por ciento fue de violencia extrema (golpeadas, apuñaladas y degolladas), mientras que apenas un 2 fue por armas de fuego. En cuanto a los agresores, un 69 por ciento están detenidos, un 8 está con sentencia y un 8 se suicidó. Tales cifran muestran la falta de sentencias condenatorias y la fragilidad de las relaciones familiares en los hogares de Cochabamba.Los Tiempos / Cochabamba