Objetivo. Con el dinero de la venta de la tapitas se comprarán equipos y medicamentos.
Ref. Fotografia: Voluntarias. Recepcionaron todas las tapitas que llegaron hasta el Parque Urbano.
Una gran fiesta fue la que se vivió en el Parque Urbano, donde se realizó la segunda «Tapatón» en favor de los niños del Oncológico que padecen algún tipo de cáncer. El objetivo es recolectar la mayor cantidad de tapitas de gaseosas, para luego venderlas a una empresa recicladora y con el dinero, cubrir las necesidades que tienen muchos pequeños.
Gran afluencia de gente. Durante la jornada, se pudo evidenciar que los más emocionados fueron los más pequeños, que llegaban con bolsas, botellones de agua, hasta cajas llenas de tapitas de todos colores. La actividad estuvo a cargo de Fundesi, la fundación dedicada a trabajar por las necesidades del Oncológico, que recibe a enfermos de cáncer. Los asistentes, disfrutaron de una mañana llena de diversión y emociones, donde se pudo apreciar el talento de los pacientes que están luchando contra esta enfermedad. La oncóloga y pediatra del hospital Oncológico, Yolanda Ernst, manifestó que son los más pequeños los que piensan en las tapitas por otros que están enfermos, asimismo dijo que el dinero que se obtenga por la venta de las tapitas, será para la compra de equipos y medicamentos para los pacientes de este hospital. «Son muchos niños los que ya se han beneficiado con esta campaña. Decirle a todas las personas que no se desanimen a seguir ayudando y juntando tapitas, toda ayuda es bienvenida, nunca es poco, una tapita al lado de otra pueden hacer una torre de amor que llega hasta el cielo», fueron las palabras de la oncóloga, a tiempo de agregar, que se vendrán más «tapatón», de acuerdo a las necesidades que se tenga.
El Oncológico con grandes necesidades. Por otro lado, Ernst manifestó que las necesidades del Oncológico son grandes porque los tratamientos son muy costosos, pese a que gran aporte de la quimioterapia la tienen cubierta con una donación de España. «Hacen falta más ítems, más espacios, necesitamos ampliar más, hay muchos niños que no pueden entrar a hacer su quimioterapia.
Una historia de esperanza. Ariana Medina, con tan solo 12 años tiene una historia de esperanza, hace dos años le detectaron leucemia, desde entonces empezó su lucha, aferrándose a la vida y no dejándose vencer. La adolescente posee un gran talento, con el cual deleita a muchos con cada una de las canciones que interpreta. «Dios me dio la fuerza para que yo siga adelante y lograr vencer a la enfermedad. Pido a las personas que sigan ayudando a todos los niños que lo necesitan», fueron las palabras de esta luchadora.
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ya se han realizado en favor de los niños del Oncológico.
Fuente: eldia.com.bo