Der Untergang des Abendlandes

Arde occidente en gigantesca pira en la Île de la Citê. Nuestra Señora se desmorona ante el regocijo cómplice de la babucha y el cristianismo desmembrado y desmoralizado espera inerte el filo frío y traicionero del alfanje como anuncio a la capitulación final de los últimos cruzados y la venganza de las derrotas sarracenas.Nunca más la aguja de una iglesia rebasará al minarete y los turbantes marcharán atravesando el Arco del Triunfo y harán festín en los Campos Elíseos en resarcimiento a las lágrimas de Boabdil el último sultán de Granada.Y no nos llevarán al mundo de Al-Juarismi el matemático sino a la estulticia del fanático irracional destructor de Palmira o a la barbarie del consulado saudita en Estambul.Y occidente en sumisión se convertirá; y los que hoy abren las puertas a los hijos de Saladino serán quienes entreguen sus hijas al harén y sus mujeres a la servidumbre.Porque no vienen con contemplaciones , vienen a matar o a morir matando porque odian a Descartes, detestan a Galileo, aborrecen a Einstein , ni que decir a nuestro querido Nietzsche o a Schopenhauer y para ellos la cristiandad es territorio de conquista.No habrán más un Lepanto o Covadonga sino muchos Charlie Hebdo o Bataclán. Y no hará falta mucha espera, pronto flameará la media luna en el teatro Garnier, en la Catedral de Colonia, en la Giralda , en La Moncloa y en El Elíseo, en el Madrid de los Austria y en el retablo de la Catedral de Toledo y en el Bundestag. Harán pascana en El Rialto de Venecia, en el Quirinal y a La Pietá le pondrán burqa. Y con el Papa que tenemos le pondrán una shisha al baldaquino.Cuando bañen sus camellos en los espejos de agua de Versalles y conviertan el Trianon en caballerizas, cuando destapen la tumba de Carlomagno en Aquisgrán, cuando en Los Inválidos profanen la tumba de Napoleón o descuelguen el Leon Alado de la Plaza de San Marcos será demasiado tarde. Habremos perdido a Dios, la historia, nuestro arte y cultura y podremos escoger entre el réquiem de Verdi o el de Mozart para despedir nuestra civilización .Mientras tanto en Rusia, encabezados por la Iglesia Ortodoxa suenan los acordes de Svyashchénnaya Voyná ( La Guerre Sacreé) para repeler la amenaza infiel.Fuente: Alfredo Leigue