En este espacio siempre insistimos que el mejor gobierno es el que proviene de la fuerza ciudadana, de individuos conscientes, bien informados y educados para convivir pacíficamente sin la necesidad de un Estado gendarme, de caudillos mesiánicos ni de falsos iluminados con sobredosis de neuronas. La mejor demostración de esta inteligencia colectiva lo ha dado hace unos días la ciudad alemana de Ostritz, donde debía celebrarse el festival denominado Escudo y Espada que reúne cada año a cientos de neonazis, cuya violencia y demostraciones de prepotencia suelen causar graves problemas. Los vecinos de la localidad no hallaron mejor fórmula para correr del lugar a los intrusos que comprar toda la cerveza de los supermercados. Cuando llegaron los fanáticos no encontraron qué tomar y la fiesta duró menos de lo previsto y se convirtió en un mar de aburrimiento. Pensemos en la coca y el auge de los “boleadores” en nuestro medio.
Fuente: eldia.com.bo