Policías admiten que perdieron la autoridad y bajaron la guardia

Altos jefes policiales reconocieron sometimiento político al gobierno. Dicen que son utilizados para minimizar los problemas del Gobierno con los sectores sociales.

Cúpula policial se reunirá para emitir criterio

LA RAZÓN



• LA AGRESIÓN • El viernes, Obleas fue protegido por su edecán mientras era golpeado.

No sólo los policías de base, que este lunes expresaron indignación por los abusos cometidos por los cívicos y jóvenes unionistas el viernes último, sino también ayer policías de alta graduación reiteraron el malestar general y dijeron que perdieron la autoridad por el sometimiento político que les obliga a bajar la guardia ante «una orden mal dada».

Cinco altos jefes policiales, dos generales y tres coroneles, quienes pidieron mantener sus nombres en reserva, coincidieron, por separado, que la indignación abunda en filas de los uniformados por «el uso que le da el Gobierno a la Policía».

«La Policía se convirtió en el brazo —operativo— del Gobierno y no del Estado. Lamentablemente, nuestros superiores no pueden controlar ahora la situación y, de acuerdo a nuestros reglamentos, está prohibido hablar, nadie quiere opinar, estamos indignados, ya no hay respeto, se ha perdido la autoridad», reclamó un coronel en actividad.

Un general aseguró que en la Policía «estamos preocupados; la polarización política, lamentablemente, pone a la institución en una situación especial, y esto es sensible hasta para el país; costará mucho que la Policía, el Estado y el Gobierno recuperen el principio de autoridad».

«Estamos siendo utilizados por el espectro político. Los problemas los están resolviendo a través de la Policía y eso no corresponde, eso lleva a un descrédito e incluso del Gobierno», acotó otro general en servicio.

Otra autoridad policial denunció que la institución del orden es utilizada para minimizar los problemas del Gobierno con los sectores sociales.

La noche del viernes 15 en Santa Cruz, el entonces comandante departamental, coronel Wilge Obleas, el comandante general, Miguel Gemio, y un ayudante fueron golpeados cuando salían de una reunión en el Comité Cívico. Horas más tarde, Obleas pidió su relevo, por motivos de salud, y asumió el cargo interino el subcomandante, coronel Edwin Foronda.

La pérdida de autoridad fue citada por los jefes policiales entrevistados y afirmaron que se encuentran «indignados, porque debemos acatar esas órdenes».

Un tercer coronel recordó que la orden de desalojo violento a personas con discapacidad por parte de la Policía cruceña, el viernes 15, no debió ser acatada. «Uno debería negarse a cumplir ciertas órdenes mal dadas», dijo.

Guadalupe Cárdenas, a nombre de las esposas de los policías de base, anunció vigilia el martes en la plaza Murillo y juicio contra agresores del viernes 15.

Cúpula policial se reunirá para emitir criterio

PRONUNCIAMIENTO

La Policía Nacional anunció que hoy realizará una reunión cupular para analizar la situación por la que atraviesa la entidad del orden, a fin de emitir un criterio en contra de las agresiones sufridas por las autoridades policiales el viernes en Santa Cruz.

El teniente coronel Ángel Rivero, comandante de la Unidad de Bomberos de la zona Sur de La Paz, precisó que la convocatoria fue realizada vía memorándums a las autoridades policiales del departamento para analizar la agresión del viernes y tomar una posición al respecto.

Anticipó que en Santa Cruz, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) analiza las imágenes facilitadas por los medios audiovisuales y reveló que ya se tiene una lista tentativa de los responsables.

Por otro lado, una alta autoridad policial anunció que hoy se reunirá el círculo de generales para emitir su propio criterio.

«Será una reunión de emergencia y emitiremos un criterio no contra el Gobierno, porque somos respetuosos, pero será para orientar sobre todo las agresiones del viernes», precisó.

El director nacional de la FELCC, coronel Pablo Caballero, afirmó que lo sucedido en Santa Cruz, cuando el ex comandante, coronel Wilge Obleas, su ayudante y el comandante general, Miguel Gemio, fueron golpeados, debe servir para reflexionar.

La agresión del viernes «obliga a tener ciertas actitudes y medidas para recuperar la autoridad que tenemos como Policía», dijo.