Evo juega fútbol, mientras en Bolivia se agrava crisis económica

6-6. El equipo de Evo Morales empata con la selección de El Salvador de 1982.

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San Salvador, 30 oct (EFE).- El presidente de Bolivia, Evo Morales, se tuvo que conformar con el empate a seis goles entre un equipo gubernamental dirigido por él que se enfrentó hoy a una selección de El Salvador que participó en el Mundial de España de 1982.



El juego, que en el primer tiempo finalizó 5-2 a favor del equipo de Evo Morales, se disputo en la cancha "La Gambeta", en el extremo sur de San Salvador, ante más periodistas que aficionados, para quienes el ingreso fue restringido por razones de seguridad.

La selección salvadoreña se puso en ventaja al minuto cuatro con un gol de Luis Baltazar "El Pelé" Zapata, autor del único gol que El Salvador anotó en el Mundial de España’82.

El joven equipo de Morales, que juega un fútbol rápido, respondió pronto y al minuto 28 estaba ganando por 5-2 ante los veteranos salvadoreños.

Con ese marcador los equipos se fueron al descanso, presagiando entre los pocos aficionados que en la segunda parte los bolivianos también entrarían arrolladores.

Pero los salvadoreños, que no han olvidado la técnica, en la segunda parte hicieron mejor las cosas.

El equipo de Bolivia solamente anotó un gol en el segundo tiempo, mientras que los salvadoreños se despacharon con cuatro, con los que empataron el juego a seis goles.

El presidente Evo Morales no anotó, pero participó en algunas jugadas que terminaron en gol a favor de su equipo. Morales hizo una pausa en la XVIII Cumbre Iberoamericana para jugar el encuentro.

Entre los aficionados en "La Gambeta" figuraba el serbio Bora Milutinovic, veterano técnico que ha dirigido en mundiales a México (1986), Costa Rica (1990), Estados Unidos (1994), Nigeria (1998) y China (2002).

Bora también intentó llevar a otros mundiales a Honduras y Jamaica en 2006.

En el partido de hoy participaron ex mundialistas salvadoreños como Jaime Rodríguez, Francisco Osorto, Francisco Jovel, José Rugamas, Mauricio Alfaro y Miguel González