El desempleo afectó a más de 60 familias, que ahora no tienen una fuente segura de ingresos para llevar el sustento a sus hogares.
Producción: una trabajadora de Nueva Esperanza cose una prenda de exportación.
El Diario
La empresa textil “Nueva Esperanza”, instalada en la ciudad de El Alto, afirmó que la amenaza de la suspensión del Atpdea, tuvo sus primeros efectos en sus instalaciones, con el despido de más de 60 trabajadoras.
La fábrica textil, realiza el mejoramiento de prendas de vestir para la exportación, que se vio favorecida con la aplicación de las preferencias arancelarias, que abrió importantes mercados en los Estados Unidos, lo que produjo un aumento en la producción de 7 mil a 30 mil productos mejorados por mes.
La propietaria de la compañía textil “Nueva Esperanza”, Vilma Rocha, señaló que a la fecha la producción y el empleo habrían descendido considerablemente, debido a la disminución de la demanda en los últimos meses.
“Ahora sólo llegamos a mil prendas exportadas, lo que representa cerca del 300 por ciento de paralización productiva”, aclaró.
El desempleo afectó a más de 60 familias, que ahora no tienen una fuente segura de ingresos para llevar el sustento a sus hogares.
“La empresa priorizó mediante un convenio con un club de madres, capacitar y trabajar con mujeres, que mantienen solas a sus hijos, ahora ellas están sin empleo”, dijo.