El canciller García Belaúnde pidió a los medios que no sigan creando alarma en torno a la delicada situación diplomática con Bolivia.
La población de Sicuani (Canchis) en Cusco también protesta y exige al gobierno de Alan García soluciones a sus demandas (foto diariolaprimeraperu.com)
Por Anf | – Agencia – 25/06/2009
El canciller del Perú, José Antonio García Belaúnde hizo un llamado a los medios de comunicación de su país y les pidió que no sigan creando alarma en torno a la delicada situación diplomática por la que atraviesan el gobierno de su país con Bolivia, a raíz de últimos entredichos entre autoridades de La Paz y Lima.
Aseguró sin embargo que está convencido de que la tensa relación entre Bolivia y Perú puede ser solucionado mediante una reflexión y diálogo profundo entre ambos países.
Ayer, dos medios de comunicación impresos del Perú abrieron su edición con la foto del presidente Evo Morales a quien uno de ellos califica de ser «desbocado», en tanto que el otro titula «otra burrada de Morales», en alusión a las declaraciones del mandatario boliviano que calificó en pasados días a su colega peruano Alan García como el peor presidente del mundo después del ex presidente de los Estados Unidos, George Bush.
El jefe de la diplomacia peruana, conversó esta jornada con Fides mediante contacto telefónico, durante la cual, también la autoridad peruana aseguró que nunca declaró que para reencaminar relaciones bilaterales el presidente Evo Morales debía pedir disculpas, reiteró que espera que esté problema sea superado lo antes posible y dejo como un «rumor» la posible ruptura de relaciones.
«Yo lamento mucho que una respuesta mía haya dado origen a un titular que no corresponde a la verdad, a mi se me pregunto: ¿usted cree que si el presidente Evo Morales pidiera disculpas, mejorarían las relaciones? Mi respuesta fue si como no podía ser otra, yo no estoy esperando una disculpa, lo único que si pido es que importante para las buenas relaciones de los dos países que haya respeto, yo no entro al tema de las disculpas, ni las espero ni las pido», dijo al medio paceño.
La autoridad peruana espera que este grave inconveniente diplomático sea superado con prontitud por la historia que tienen Bolivia y Perú, lo cual exige solucionar este problema en el marco del respeto mutuo:
Los medios peruanos editorializan sobre la relación Perú- Bolivia y la injerencia del presidente Hugo Chávez:
EDITORIAL de El Comercio de Lima
25 de junio de 2009
El Perú rechaza toda injerencia desestabilizadora
Es muy grave la denuncia hecha por nuestro compatriota Mario Vargas Llosa respecto de que el presidente venezolano Hugo Chávez estaría promoviendo una odiosa campaña de desestabilización en el Perú “a través de movimientos populares y partidos políticos”.
El Perú no puede tolerar más injerencias de este tipo, que mellan nuestra soberanía e interfieren indebidamente sobre la política interna que estos días atraviesa por una crítica situación por los desbordes violentistas de Bagua, Andahuaylas, Sicuani, entre otros.
Como lo hemos reiterado en estos días, hay que distinguir entre la protesta social legítima, que demanda diálogo y soluciones razonables. Pero, con el mismo énfasis, debemos alertar sobre aquellos movimientos promovidos por grupos radicales de ultraizquierda o seudonacionalistas que solo buscan desestabilizar, subvertir el orden y crear el caldo de cultivo para las opciones contrarias al sistema democrático.
En el caso de Chávez llueve sobre mojado. Es conocida su obsesión con su proyecto hegemónico bolivariano, populista y estatista que ha logrado convocar a otros gobiernos satélites como los de Bolivia, Nicaragua y recientemente de Ecuador, que se mueven a su compás.
Dentro de ello, es igualmente escandaloso el modo como pretendió interferir en las pasadas elecciones peruanas, cuando trató de imponer a todo costa al candidato Ollanta Humala, aunque finalmente el electorado peruano supo responder con dignidad y libertad.
Pero, por lo que parece, Chávez no ha aprendido la lección. Por el contrario, como bien señala Vargas Llosa, no solo pretende la reelección indefinida y ha endurecido su gobierno, cada vez más antidemocrático, dictatorial e intolerante contra sus propios ciudadanos, sino que no oculta su antipatía por gobiernos como los del Perú y Colombia que, a decir de nuestro laureado escritor, son como “dos espinas clavadas en su garganta”.
Ello porque ,aparte de no sucumbir a su órbita y sus caprichos, estos respetan los principios democráticos y promueven la libertad y la competencia privada, todo lo contrario a la doctrina chavista, que hoy se caracteriza por una andanada de estatizaciones de empresas y de ataques a la libertad de prensa y de expresión.
Efectivamente, luego de la vergonzosa confiscación de RCTV, hoy es inminente el cierre de otro canal independiente, como Globovisión, simplemente por no alinearse con los dictados del oficialismo, que recusa la pluralidad y la crítica.
En esta complicada coyuntura, el Gobierno Peruano debe investigar, denunciar y rechazar con firmeza cualquier burda intromisión del chavismo e identificar a los agentes que, en su nombre, estarían promoviendo la inestabilidad y eventualmente la violencia, todo lo cual debería tener un correlato formal en los canales diplomáticos.
Finalmente, cuando se ataca la soberanía y la democracia es también oportunidad de que la oposición precisamente democrática deje de lado sus agendas particulares para rechazar estas nefastas injerencias extranjeras que tanto daño están haciendo al orden, la gobernabilidad y la peruanidad