Entre 2006 y 2008 la capacidad productiva de cocaína en Bolivia subió 9 por ciento. Para producir un kilo de cocaína se necesitan 315 kilos de coca yungueña y 370 de la hoja del Chapare. La ONUDD presentará hoy el Reporte Mundial sobre Drogas en Viena, Austria.
La Prensa
Para producir un kilo de cocaína se necesitan 315 kilos de coca yungueña y 370 de la hoja del Chapare. La ONUDD presentará hoy el Reporte Mundial sobre Drogas en Viena, Austria.
La producción de hoja de coca en Bolivia durante 2008 generó 293 millones de dólares en los mercados legales e ilegales, en tanto que el potencial productivo de cocaína en el país alcanzó el año pasado un máximo de 113 toneladas.
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El incremento de los cultivos en Bolivia entre 2006 y 2008 elevó la capacidad del país para producir el narcótico de 94 a 113 toneladas, según el monitoreo de cultivos de hoja de coca llevado a cabo por la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito (ONUDD).
El estudio da cuenta de que esa cantidad equivale al 3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del año pasado, calculado en 9.700 millones de dólares. Si se considera el PIB agropecuario, que el año pasado ascendió a 1.400 millones de dólares, esta suma representa el 21 por ciento.
El precio de la hoja subió en 2008 en 29,3 por ciento con relación al año anterior.
Fuentes del Ministerio de Gobierno aseguran que el Órgano Ejecutivo evalúa esa información, aunque aclararon que los procesos de erradicación forzosa y racionalización de cultivos comenzarán a fines de mes.
Un funcionario del Viceministerio de Defensa Social explicó que toda racionalización debe contar con el visto bueno de las organizaciones sociales, pero los operativos de interdicción solamente son desarrollados por las fuerzas antidrogas y que los productores de la hoja tienen la obligación de denunciar a los narcotraficantes.
El responsable de la Dirección General de la Coca e Industrialización (Digcoin), Luis Cutipa, aseguró que, aunque con demoras, los proyectos para construir plantas industrializadoras avanzan tanto en el Chapare como en los Yungas.
“En Cochabamba se construye la obra gruesa y para La Paz se ha concluido el proyecto a diseño final. Fabricaremos cinco productos. El objetivo es absorber la producción excedentaria para que no se desvíe”.
Según la información de ONUDD, en 2006 los cocales abarcaron una superficie de 27.500 hectáreas en el país. Un año después esa cantidad se elevó a 28.900 hectáreas y hasta julio de 2008, Bolivia contaba con 30.500 hectáreas.
Iván Alfaro, gerente del proyecto F57 de la ONU, entidad que levanta y releva esa información, explicó que en 2006 Bolivia tuvo la capacidad para producir 94 toneladas de cocaína, en sus formas de pasta base y clorhidrato o “cristal”.
En 2007, las 28.900 hectáreas pudieron haber dado lugar a una producción máxima de 104 toneladas de esta droga, y en 2008 esa cantidad pudo elevarse a 113 toneladas.
La Ley 1008 de Sustancias Controladas establece una superficie máxima de 12.000 hectáreas con esta plantación. El máximo histórico de cocales registrado en Bolivia se alcanzó en 1998 con un estimado de 38.000 hectáreas y el mínimo se logró en 2000 con 14.600 hectáreas.
La ONUDD comenzó a hacer este monitoreo en 2003 en el país, desde cuando, con excepción de 2005, se advierte un aumento sostenido de los cocales.
El estudio de Naciones Unidas indica que las 30.500 hectáreas cultivadas pueden rendir aproximadamente 54.000 toneladas de hoja de coca.
El resumen ejecutivo del informe del organismo internacional señala que de ese total, unas 36.200 toneladas de la hoja pueden destinarse a la elaboración del narcótico.
Coca y cocaína
El mencionado documento apunta que “estudios anteriores concluyeron que para la producción de un kilogramo de cocaína, en la región del trópico de Cochabamba se necesitan 370 kilos de hoja de coca y en los Yungas, 315 kilos”.
Bolivia, Perú y Colombia son los tres únicos países del mundo donde se produce hoja de coca y en los que se elabora cocaína.
Colombia es el primer productor mundial de este alcaloide, aunque (ver recuadro) sus niveles potenciales de elaboración de la droga se redujeron en el trienio 2006-2008 de 610 a 430 toneladas, mientras que Perú y Bolivia mantienen niveles ascendentes en el rubro. La reducción global fue, en el periodo, de 139 toneladas.
En Perú, la capacidad productiva se elevó de 280 a 302 toneladas y en Bolivia, de 94 a 113.
Antonio María Costa, director ejecutivo de la ONUDD, advirtió, en la página oficial de esa entidad internacional, que “los aumentos registrados en Bolivia y Perú manifiestan una tendencia en la dirección incorrecta. Desde 2000, el cultivo de coca ha disminuido en Colombia y ha aumentado en Bolivia y el Perú”.
El mencionado documento deja constancia de que “a pesar del incremento del cultivo de hoja de coca en Bolivia y Perú, las plantaciones disminuyeron a nivel global en 8 por ciento debido al decremento ocurrido en Colombia (-18%)”.
Los datos se obtuvieron a partir de interpolar imágenes satelitales de alta resolución con apoyo en un sistema de monitoreo basado en sensores remotos, sistemas de información geográfica y videográfica.
Todos los datos se verifican de manera exhaustiva para contar con información fidedigna que refleje con precisión la realidad de estas plantaciones.
Adepcoca no consideró todavía el informe
Claudio Manríquez, dirigente de la Asociación Departamental de Productores de Coca de La Paz (Adepcoca), declaró que la entidad todavía no consideró el informe sobre el crecimiento de los cultivos de la hoja en el país, porque “no lo recibimos de forma oficial para estudiarlo, pero una vez que lo tengamos bajaremos a las regionales”.
Los responsables de la Asociación se reunieron ayer por la tarde en su sede, oportunidad en la que trataron asuntos administrativos internos.
El representante de los cultivadores de coca de la zona subtropical paceña afirmó: “Estuve el viernes en la Cancillería. Fue una explicación muy breve con Datashow. No se profundizó en detalles y aspectos que se deben considerar”.
“Mi reacción personal sobre ese documento es de preocupación. Sólo se habla de los Yungas, pero nada se dice del Chapare y otras regiones como Caranavi o Palos Blancos, que no están comprendidos en las zonas legales y tradicionales”.
Manríquez dijo que el Gobierno debería intervenir en ambas regiones, que si bien forman parte de las provincias yungueñas, no están consideradas dentro de la Ley 1008, por lo que “se debería actuar y comenzar a erradicar esos cultivos”.
Lamentó que los productores de café, en la región de Caranavi, hubiesen dejado de cultivar esa planta y se dediquen a sembrar coca.
La mencionada disposición legal establece que las zonas tradicionales de cultivo se hallan en sectores de las provincias Sud Yungas, Nor Yungas, Inquisivi y Larecaja, donde la extensión máxima de plantaciones debe ser de 12.000 hectáreas.
Adepcoca cuenta con unos 28.000 afiliados, quienes se encuentran actualmente en proceso de reinscripción para proseguir sus labores.
Colombia redujo más que los cocales de 2 naciones
La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) reportó que Colombia erradicó, tanto de forma manual como por fumigaciones, 82.300 hectáreas desde el año 2000.
“Esto es un logro extraordinario”, dijo el director ejecutivo de esa institución internacional, Antonio María Costa. “Quiere decir que se erradicaron más arbustos de coca en Colombia que los que se cultivaron en toda Bolivia y Perú”.
Este hecho significa que prácticamente la décima parte de su territorio continental estaba cubierto por cocales. Según la página oficial del organismo internacional, las erradicaciones se hicieron tanto manualmente como a través de fumigaciones.
De esa manera, Colombia redujo su potencial productivo de cocaína de 600 a 430 toneladas métricas, aunque este país tiene la posibilidad de entregar materia prima para la elaboración del 51 por ciento de lo que las repúblicas andinas, Bolivia y Perú, pudieron fabricar el año pasado.
El valor a pie de plantación de la hoja de coca en Colombia disminuye, lo que hace que ese cultivo resulte menos atractivo para los agricultores.
De hecho, 20.000 familias menos cultivaron coca en 2008 en comparación con 2007.
La ONUDD, según la información electrónica, apoya los esfuerzos de Colombia y Perú para ayudar a los agricultores a optar por medios de vida lícitos. Costa dijo: “Se necesita mucha más asistencia para el desarrollo en los países andinos, en particular en las regiones pobres, como en los Yungas de Bolivia, donde la coca es la única fuente de ingresos. Las drogas están destruyendo los ecosistemas frágiles de los parques nacionales”.
En Colombia, las fuerzas de interdicción se incautaron de 200 toneladas de cocaína en 2008, lo que representa un aumento del 57 por ciento en relación con 2007. Se destruyeron más de 3.200 laboratorios, lo que equivale a un aumento del 36%.
En Bolivia, las incautaciones de pasta base de cocaína dadas a conocer oficialmente aumentaron en un 45%, es decir, de 14.912 kilogramos a 21.641 kilogramos, y las incautaciones de clorhidrato de cocaína aumentaron en un 145% (de 2.923 kilogramos a 7.246 kilogramos).
Las autoridades de Perú comunicaron un aumento del 86% en las incautaciones de cocaína base (de 6.260 kilogramos a 11.754 kilogramos) y un aumento del 100% en las incautaciones de clorhidrato de cocaína (de 8.100 kilogramos a 16.203 kilogramos), según el organismo internacional.
Costa concluyó: “La oferta de cocaína está disminuyendo, así como su demanda en los principales mercados de América del Norte, mientras que en Europa occidental ha dejado de aumentar el uso de la cocaína. Ello podría explicar el aumento de los precios y la disminución de los niveles de pureza. También podría explicar la violencia de los carteles”.
Los detalles
LA FUERZA de Tarea Conjunta es la entidad responsable de erradicar y racionalizar los cultivos de coca ilegales.
AMBAS LABORES se efectúan en coordinación con las organizaciones sociales.
LOS OPERATIVOS de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) no se llevan adelante en coordinación con los movimientos sociales, según el Viceministerio de Defensa Social.
LA INTERDICCIÓN se dirige a destruir laboratorios clandestinos, depósitos de precursores y todos los aspectos que comprende la lucha contra las drogas.
NACIONES UNIDAS aplaudió el éxito de los operativos antidrogas llevados a cabo en el país durante el año pasado.
LOS NIVELES de incautación de hoja de coca ilegal alcanzaron 2,01 toneladas. Un año antes los secuestros fueron de 1,7 toneladas.
LAS INCAUTACIONES de clorhidrato de cocaína ascendieron de 2,9 a 7,2 toneladas entre 2007 y 2008, lo que equivale al 150 por ciento, aproximadamente.
EL 39 POR CIENTO de la superficie cultivada con cocales en el país es legal. El 61 por ciento, equivalente a 18.500 hectáreas, está fuera de la ley.
EN LOS PARQUES nacionales Isiboro Sécure y Carrasco hay 2.063 hectáreas de cocales, 13 por ciento más que en 2007.
EN LOS YUNGAS hay 20.700 hectáreas cultivadas con hoja de coca, en tanto que en el Chapare la superficie alcanza a 9.500 hectáreas. Las 300 hectáreas restantes están en Yapacaní (Santa Cruz) y Apolo (La Paz).
CON APOYO de la Unión Europea se elabora un estudio para determinar cuál es la demanda legal de la hoja de coca en Bolivia. Se espera que los resultados de este trabajo estén disponibles a partir de 2010.
Cultivos de coca en Bolivia
AÑO 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008
TOTAL 14.600 19.900 24.400 23.600 27.700 25.400 27.500 28.900 30.500
En todos los casos se considera la cantidad de hectáreas cultivadas con hoja de coca en el país.
La ONUDD comenzó a efectuar mediciones en el país a partir del año 2003.
En 1998 se estimó 38.000 hectáreas y en 1999, 21.800. La reducción obedeció a la aplicación del Plan Dignidad de erradicación forzosa de cocales y compensación económica.
Porcentajes
El aumento del potencial productivo de cocaína en el país entre 2006 y 2008 es de 20,2%.
En 2008, Bolivia contaba con 30.500 hectáreas de cultivos, 6% más que un año antes.
El año pasado las tres naciones pudieron producir un máximo de 845 toneladas.