El líder indígena está acusado de instigar los enfrentamientos que han dejado un saldo de 24 policías y nueve nativos muertos, en Perú.
Vecinos de El Alto se reunirán con embajador del Perú para pedir revisar asilo a ex ministros
Las últimas fotos de Pizango antes de huir (Efe)
Por Efe | – Agencia – 10/06/2009
LA PAZ | El embajador de Bolivia en Lima, Franz Solano, afirmó hoy que el líder de la principal organización indígena amazónica, Alberto Pizango, no solicitó asilo político en su país después de los enfrentamientos que causaron más de 30 muertos en Perú.
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«Oficialmente no se ha solicitado ninguna petición respecto al asilo que habría solicitado a la embajada de Bolivia el señor Pizango», aseguró Solano en una entrevista telefónica con Radio Erbol.
Fuentes de la cancillería peruana informaron ayer que Pizango, perseguido en su país por los delitos de rebelión y sedición, pidió asilo sin éxito en las legaciones de Bolivia, Estados Unidos y Francia.
El líder indígena, que permanece refugiado en la embajada de Nicaragua en Lima desde el lunes pasado, está acusado por el Gobierno peruano de instigar los enfrentamientos que desde el pasado viernes han dejado un saldo de 24 policías y nueve nativos muertos, según cifras oficiales.
Solano recordó que el pasado sábado algunos parlamentarios y ministros peruanos aseguraron que Pizango había traspasado la frontera hacia Bolivia y que al día siguiente se confirmó que el líder indígena había recibido asilo en la embajada nicaragüense en Lima.
Por ello, criticó la «manera irresponsable» con la que se han tratado algunas informaciones con «una connotación de hacer quedar mal» a su país.
«El asilo es un derecho, pero no como han recibido en Perú a procesados por delitos de lesa humanidad, a prófugos de la justicia boliviana», dijo Solano.
El representante diplomático boliviano se refirió así al refugio concedido por Perú a tres ex ministros del Gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, acusados de «genocidio» por la muerte de más de 60 personas en la represión a una ola de protestas en 2003 durante el llamado «Octubre Negro».
Por ello, mostró su interés en que «los fugitivos sean devueltos, porque de ninguna manera se puede aceptar que un Estado haya aceptado a estos señores que tienen un proceso en el Tribunal Supremo» boliviano.
Finalmente, Solano defendió la carta que el presidente Evo Morales envió la semana pasada a la cumbre indígena celebrada en Puno y rechazó la vinculación que desde algunos sectores se hizo de ese documento con el conflicto ocurrido en la Amazonía peruana.
La carta que Morales escribió para un encuentro indígena celebrado la semana pasada «no fue en alusión al estado ni al Gobierno peruano, sino en el contexto internacional en un evento en el que han estado representantes de muchos países», afirmó.
Para el embajador boliviano, Morales pretendió trasmitir en esa misiva un mensaje en el contexto internacional «en defensa de los derechos de los indígenas y el medio ambiente».
Vecinos de El Alto se reunirán con embajador del Perú para pedir revisar asilo a ex ministros
La Paz, 10 jun (ABI).- La Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto anunció que se reunirá el viernes con el embajador del Perú en Bolivia, José García, para pedir que el Gobierno peruano reconsidere el refugio y asilo otorgado a tres ministros del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, sumariados por genocidio.
«Tenemos una reunión con el Embajador del Perú para demandar la reconsideración del asilo político de los tres ex ministros que están en Perú» informó, el dirigente de la Fejuve, Roberto Rojas.
«La reunión se llevará a cabo el próximo viernes en instalaciones de la embajada de Perú, en la ciudad de La Paz», precisó.
Los tres ministros bolivianos, Jorge Torres Obleas, Mirtha Quevedo y Javier Tórrez Goitía, a los que el gobierno peruano otorgó asilo, fueron declarados rebeldes por el Tribunal de Sentencia del juicio de responsabilidades que se inició hace dos semanas en contra del ex presidente Sánchez de Lozada (2002-2003) y parte de su Gobierno y se libró mandamientos de aprehensión para su captura o para su extradición.
Sánchez de Lozada y sus ex ministros son acusados la muerte de 67 personas en la represión de octubre de 2003, la mayoría ciudadanos de El Alto, vecina de La Paz.