Zelaya desplanta a Calderón por Obrador: “Es mejor sentirse presidente que ser Presidente”

image ZELAYA PAGA A CANDERON CON UN DESPLANTE DESPUÉS DE HABERLE DADO UN TRATO COMO SI FUERA OBAMA O EL REY DE ESPAÑA

"Mel" hace desplante a Calderón por Obrador

Zelaya quería aplausos en lugar de abucheos, por eso lanzó elogios a López Obrador en mitin con simpatizantes del PRD y PT

“Es mejor sentirse presidente que ser Presidente”, dijo Zelaya para luego dedicar la frase a AMLO Cancillería mexicana emite comunicado intentando aclarar el impasse



El presidente que salió en pijama de Honduras y en México recibió el mismo trato que este domingo se le dará a Obama y a Harper insulta a Calderón

Ciudad de México, México – ElHeraldo.hn

Las declaraciones de Manuel Zelaya Rosales, elogiando a Andrés Manuel López Obrador, le cayeron como un balde de agua fría al gobierno mexicano.

Y es que, apenas habían pasado horas del extraordinario recibimiento, con todos los honores, de parte del presidente Felipe Calderón, cuando Zelaya manifestaba ante decenas de lopezobradoristas en el Teatro de la Ciudad: "en estos países es mejor sentirse presidente que serlo y eso se lo digo a López Obrador que está escuchando".

La declaración arrancó sonoros aplausos de una multitud que minutos antes lanzaba abucheos cada vez que Zelaya Rosales hacía mención a los honores recibidos de parte de Felipe Calderón.

Milenio.com resalta que "Manuel Zelaya Rosales concluyó su visita de dos días por el país con un reconocimiento a… Andrés Manuel López Obrador".

Al Teatro de la Ciudad, Zelaya asistió por invitación del Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba.

Sin embargo, para el evento de respaldo a Zelaya optaron por llamarse Movimiento Mexicano de Solidaridad con Honduras.

Según lo informado por Milenio.com, cuando le llegó el turno de hablar, Zelaya elogió a Felipe Calderón por el apoyo que le ha brindado. Por respuesta, los integrantes de esa organización, compuesta, en su mayoría, por adherentes al movimiento de Andrés Manuel López Obrador -entre los que estaban los senadores Yeidckol Polevnsky, del PRD, y Rosario Ibarra y Alberto Anaya, del PT-, le contestaron con un sonoro abucheo.

Notoriamente desconcertado, Zelaya, en un intento por apaciguar los ánimos de los presentes, dijo: "Yo no quiero un puesto, nunca he luchado por un puesto; como decía Víctor Raúl Haya, en Perú, cuando un reportero le preguntó: ‘doctor, usted que ha luchado seis veces por ser presidente, ¿qué opina ahora?’ ‘Mira, hijo -le respondió Haya-, en estos países es mejor sentirse presidente que serlo. Y eso se lo digo a López Obrador que está escuchando". Los abucheos dieron paso a los aplausos y Zelaya sonrió.

Calderón recibió a Zelaya, el martes, como "excelentísimo presidente de la hermana República de Honduras". Este trato lo calificó Hugo Chávez, como "trato digno". Zelaya sabía que sus declaraciones podían considerarse un desplante a Felipe Calderón, a quien los seguidores de López Obrador consideran un usurpador de la presidencia. Por eso, Zelaya comenzó a comunicarse con cuanta radio, televisora o medio de internet hiciera referencia a sus palabras.

El tiempo resultó insuficiente. Ya todos los medios informaban sobre los elogios para López Obrador, quien sigue afirmando ser el presidente legítimo de México.

En entrevista para el noticiario de Ciro Gómez Leyva en Milenio Televisión, insistió en que nunca pretendió dar un espaldarazo al tabasqueño.

"Nunca ha sido la intención hacerlo así. Simplemente es una cita, una cita histórica de un líder muy conocido en la historia de la política de América del Sur, Víctor Raúl Haya de la Torre, quien la expresó después de muchos intentos de querer llegar a ser presidente y de no poder llegar a serlo, que hizo esa frase a un periodista en la cual expresa que ser presidente es sumamente complejo que muchas veces es mejor sentirse".

"Es como una reflexión. No trato de involucrarme nunca en política interna y menos en un país donde estoy invitado de una forma tan solemne y tan importante como lo ha hecho el presidente de los mexicanos, Felipe Calderón".

En el caso de la información difundida por la estación W Radio y retomada por el portal de El Economista, Zelaya se comunicó para afirmar que él da todo su apoyo al presidente Calderón y que cualquier otra versión de sus palabras "es una calumnia".

En el noticiero de Salvador Camarena, Tercera Emisión de W Radio, Zelaya fue confrontado al ponerlo a escuchar sus propias palabras.

"Yo traté de explicar mi relación con el presidente Calderón, aunque ellos silbaban, yo traté de hacerlo porque estoy invitado aquí por el Presidente y era necesario manifestar especialmente mi respeto hacia él", dijo.

Según la información publicada por El Universal, Zelaya también habló con la secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa, para negar que haya apoyado a algún ex candidato presidencial mexicano.

De acuerdo con un comunicado de la cancillería, emitido la noche del miércoles, Zelaya "rechazó de manera contundente dichas declaraciones" y, durante la conversación con Espinosa, le agradeció las atenciones recibidas en su visita a México.

En una llamada telefónica hecha a la Agencia de Noticias del Estado Mexicano, Zelaya también expresó su preocupación en torno a las declaraciones que le atribuyen.


Basta algunas de las opiniones editoriales para confirmar que el sainete salió mal para Calderón. Seguimos aprendiendo de los errores sin duda alguna

EXCELSIOR. Zelaya entró al salón de plenos del Senado mexicano sin su famoso sombrero. El depuesto presidente de Honduras no se lo quitó por respeto al recinto legislativo, sino que fue una sugerencia que le hizo la Mesa Directiva. Y es que, en reunión previa, el senador del PRI Francisco Arroyo, vicepresidente de la Cámara alta, advirtió que, si el ilustre visitante subía a la tribuna con el famoso Stetson, personalmente le pediría que se lo quitara.

El sombrero no pudo quedar en mejores manos. La embajadora de Honduras, Rosalinda Bueso, lo tuvo en custodia durante todo el tiempo que su presidente permaneció en el salón de sesiones (unos tres cuartos de hora). La joven diplomática llamó poderosamente la atención de algunos legisladores y no precisamente porque cargaba el sombrero.

Rafael Segovia, Malos tiempos.- El Presidente tiene ocupaciones de orden centroamericano, donde el orden parece no funcionar. Nuestra diplomacia ha quedado en manos de Los Pinos, que saca a las guardias presidenciales para rendirle honores al señor Zelaya y su sombrero inamovible. El señor Calderón, guardián de la paz en nuestra frontera sur, cuida de que no haya golpes de Estado, no le vayan a dar uno mientras descuida a su Secretaría de Estado.

Ana Paula Ordorica, Brújula La visita de Zelaya a México nos permitió ver de cuerpo entero el nuevo estilo de liderazgo en América Latina. Cuando los hondureños le han dado la espalda al presidente que fue elegido por una agenda, mas a la mitad del camino decidió adoptar la opuesta, ¡oh sorpresa!, el mundo entero le abre los brazos al señor Mel.

Y en primerísimo lugar apoyando a Zelaya ha estado Felipe Calderón. Tiempo que en este momento podría mejor dedicarse al tema de derechos humanos y los recursos de la Iniciativa Mérida, en el caso de Obama, y al de las visas con Canadá, en el de Harper. Pero el Presidente que salió en pijama de Honduras y en México recibió el mismo trato que se le dará a Obama y a Harper obliga a modificar la agenda. EXC 26

Jorge Camil, Honduras, ¿rebelión en la granja?.- Fue triste la visita de Manuel Zelaya a México. Un presidente constitucional nómada, que va por la comunidad latinoamericana pidiendo apoyo y siguiendo el juego de Washington, mientras los golpistas se consolidan cada día más en el poder. Roberto Micheletti fijó la pauta en el WSJ: “suponiendo que todas las partes acuerden el regreso de Zelaya, yo creo que no podemos confiar en que observará la ley. Por eso debemos procesarlo”. O sea, ¡procesarlo a priori por delitos imaginarios! JOR 10

Javier Solórzano, Vitral.- ¡OUUUUUCH! Zelaya logró que el Presidente se acercara a Hugo Chávez, hizo que el país se sumara a las protestas internacionales, fue recibido en México con todos los honores, no se quitó el sombrero que le regaló Calderón para que al final, en medio de lo que dice fue “la emoción”, dijera “en estos países hay veces que es mejor sentirse presidente que serlo”. A partir de ese momento se quedó casi mudo y mientras en Oaxaca alguien se moría de la risa. UNI 2

Félix Cortés Camarillo, Cancionero.- El señor Manuel Zelaya, presidente constitucional de Honduras, recibido como tal con todos los honores por el presidente Calderón, por el gobernador Ebrard, mandatario de la capital del continente latinoamericano, por la sin duda honorabilísima Cámara de Senadores y por una cauda de prensa sin quehacer, le mandó una sonora trompetilla a su principal anfitrión, al promover a su compinche: Andrés Manuel López Obrador. La presidencia real, la espuria, la virtual. Ante la chusma convocada, cuando Zelaya intentó agradecer a Felipe Calderón el apoyo recibido de su servilismo, el abucheo acarreado brotó. Fue entonces que el presidente hondureño señaló cuán más importante es sentirse presidente que realmente serlo, para luego saludar en ausencia a Andrés Manuel López Obrador. Bravo, Felipe. MIL 12