“¡Condecoración al coronel Arteaga por librar a Cochabamba de un asesino!”, “¡Fiscal Ferrufino, traficante de la justicia!”, gritaba la gente que apoya al padre que mató al asesino de su hijo.
Familiares, amigos y simpatizantes de Jorge Arteaga, protestan contra jueces y fiscales, ayer, en el hospital Viedma. – Rocha José Los Tiempos
Por Arias Sandra – Los Tiempos – 4/10/2009
Detención preventiva para coronel Arteaga
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La fiscal dice que el acusado no puede seguir el proceso en libertad porque hay riesgo de fuga
En medio de muestras de solidaridad y firma de un libro de apoyo, ayer se realizó la audiencia de medidas cautelares que determinó la detención preventiva, en el penal de San Sebastián, de Jorge Arteaga Maldonado, coronel jubilado del Ejército que el pasado jueves dio muerte con ocho balazos, en medio de la calle, a Jorge Guzmán Carvalho (28), quien fue sentenciado por la muerte de Alex Arteaga, hijo del militar, a quien asesinó en marzo de 2007.
Al conocer la sentencia y presumiendo que Arteaga sería trasladado inmediatamente al penal, familiares, amigos y gente de la calle que llegó a darle su apoyo a reaccionaron gritando que no permitirían que saliera sin que se considere su estado de salud; pero los ánimos se calmaron cuando los abogados de Arteaga bajaron y explicaron que la sentencia no sería cumplida hasta que los médicos dieran de alta a Arteaga.
La audiencia, que se llevó a cabo en la sala 361 del tercer piso del hospital Viedma, donde Arteaga aún se halla internado, debió ser pública; pero el Ministerio Público dispuso que solamente subieran los abogados de ambas familias y algún familiar cercano. Tampoco se permitió al acceso de la prensa.
“¡Condecoración al coronel Arteaga por librar a Cochabamba de un asesino!”, “¡Fiscal Ferrufino, traficante de la justicia!”, eran algunos de los gritos coreados por la gente que poco a poco llenó la planta baja del hospital Viedma, mientras aguardaban la audiencia que estaba prevista para las 14:30. Los familiares y amigos llevaron pancartas con inscripciones similares y a medida que pasaba el tiempo, más gente llegaba hasta el lugar. Se sumaron vecinos de Pacata Alta, donde reside la familia Arteaga, comerciantes y gente de la calle que entró al enterarse de que se llevaba a cabo la audiencia. También se sumó el personal de servicio y de limpieza del hospital. Una de las trabajadoras, Cecilia Orellana, dijo que ella y sus compañeras querían brindar su apoyo como madres. “Yo puedo hacer los mismo por mi hijo”, señaló.
Hubo tensión en el ambiente cuando llegó la familia Guzmán que, a diferencia de la familia de Arteaga, prefirió guardar bajo perfil y, en ese momento, no hizo ninguna manifestación en contra del grupo que se encontraba recolectando firmas de apoyo entre pacientes, personal médico y visitantes del hospital.
Mientras la gente seguía llegando, la impaciencia comenzó a cundir entre el grupo simpatizante de Arteaga que aprovechó para salir hasta el patio del hospital a recibir a un grupo de comerciantes y organizar una marcha, prevista para mañana a las 14:00, en la Plaza 14 de Septiembre, a la que convocaron a madres con sus hijos, a estudiantes y a todo aquel que desee protestar contra lo que consideran mala administración de justicia en el país.
Pariente de Jorge Guzmán (izq) insulta a la familia Arteaga; Paola, hija de Arteaga, llora luego de escuchar las amenazas (der). Fotos.Rocha José Los Tiempos
En tanto la gente se organizaba, Paola Arteaga, hija del militar internado, conversaba con sus amigos en la puerta del hospital, cuando se escucharon gritos. Era una pariente de Jorge Guzmán, acompañada de un varón, que mientras se dirigía a su auto, comenzó a insultar a los Arteaga y gritó: “¡ella va a ser la próxima, no jodan!”. La aludida, Paola Arteaga se echó a llorar, mientras la mujer respondía con insultos a los gritos de la gente que reaccionó al darse cuenta y gritó: “¡asesinos!”.
Luego del incidente, al conocerse la sentencia, la familia Guzmán y su abogada, abandonó el lugar por la parte trasera para no encontrarse con los simpatizantes de Arteaga.
Mientras tanto y según el informe del médico de turno de apellido Zurita, Arteaga se encuentra con hipertensión y molestia torácica; pero estable y aún en observación. Señaló que queda pendiente una ecocardiografía y le calculó unos cuatro a cinco días más de permanencia en el hospital.
Situación legal
La audiencia de medidas cautelares de Jorge Arteaga, imputado por el homicidio de Jorge Guzmán C., asesino confeso del hijo de Arteaga, concluyó poco antes de las 17:00 y el abogado de Jorge Arteaga, Luis Butikofer, explicó que antes de ejecutarse la sentencia éste debía recibir el alta médica, para lo cual debían practicársele varios exámenes médicos para determinar su estado psicológico.
También señaló que existen recursos para apelar y que, luego de cierto tiempo, se puede solicitar otras medidas como la detención domiciliaria o el arraigo.
“La Fiscalía alegó que se trata de un hecho flagrante y también se basó en las declaraciones de algunos testigos que declararon que Arteaga pretende fugarse; pero más bien (la sentencia) fue porque se observaron problemas en los documentos personales que presentó”, dijo Butikofer.
Por su parte, la abogada de la familia de Jorge Guzmán Carvalho, Sandra Olguín, insistió en que el pedido de detención se basó en el peligro de fuga y en la obstaculización del proceso.
“El (Arteaga) ya fue imputado de homicidio, hay que esperar que se le dé el alta; pero considero que vamos a exigir que la sentencia se cumpla a la mayor brevedad posible”, dijo Olguín.