Gestión de opositores puede ser insostenible

fajardo El bloqueo centralista, la ingobernabilidad interna y la judicialización serán los obstáculos que tendrán que enfrentar los electos gobernadores y alcaldes que se declaren de oposición al oficialismo.

El criterio corresponde al analista político Erick Fajardo, que considera adversas las probabilidades y precaria la sostenibilidad de aquellas autoridades que se declaren opositoras y advierte sobre una posible re-asimilación al oficialismo por parte del Movimiento Sin Miedo (MSM).

Fajardo calificó además de “victorias poco claras” la reelección de los gobernadores Mario Cossío (Tarija) Rubén Costas (Santa Cruz) y Ernesto Suárez (Beni), dado que el MAS penetró y en algunos casos logró el control de sus órganos legislativos.



“Los opositores en la media luna conservaron sus bastiones pero son reductos con cimiento de barro, pues no se consiguió un claro control de los órganos legislativos, lo que llevará a la disputa con el oficialismo a un segundo momento: la pugna en los concejos municipales y asambleas departamentales”, advirtió.

Considera que la gestión será cuesta arriba, pues los alcaldes y gobernadores deberán negociar con el Gobierno, en muchos casos sin el respaldo de sus concejos, o asambleas legislativas, lo cual quitaría fuerza a las demandas regionales.

Para el analista, en un primer momento el Ejecutivo ejercitará un bloqueo económico sobre las gobernaciones y alcaldías opositoras, hasta minimizar su capacidad de gestión. En un segundo momento buscará inhabilitarlos judicialmente.

“La mayoría de los candidatos de oposición ya entró a la contienda electoral con demandas e incluso imputaciones en su contra; lo que menos debería sorprender es que esas demandas avancen hasta la destitución de las nuevas autoridades”, dijo.

Para Fajardo este panorama abrirá dos opciones a los opositores: o la sumisión al gobierno, o atrincherarse en una instancia corporativa como la FAM o el CONALDE desde donde fortalecer las demandas regionales ante el Gobierno.

“La tendencia natural será la agregación mecánica de la oposición. Seguramente ya se pensó en reuniones entre electos alcaldes y gobernadores de La Paz, Santa Cruz, Beni, Tarija, Oruro y Potosí. No obstante, dudo que alguien se arriesgue a enfrentar al Gobierno tras la dolorosa experiencia prefectural del período 2006-2009”, afirmó.

“Dudo que (René) Joaquino o (Luis) Revilla asistan a una convocatoria de la media luna, dada la experiencia de Pepelucho Paredes, cuya concurrencia a las reuniones de prefectos opositores bastó para que el MAS desahuciara su gestión prefectural”, agregó.

“Lo más probable es que, estando la oposición ausente de un paradigma y un proyecto político alternativo, la mayoría de los alcaldes de oposición se manifiesten “adscritos” al proceso de cambio y apelen al discurso de “no confrontar”, para evitar el boicot del Gobierno central y lograr gestiones municipales exitosas que les permitan proyectarse”, concluyó.

ANF – El Diario