La víctima se identificó como Carlos Fernando Bujol y aunque fue auxiliada por una ambulancia, no llegó viva al hospital. La policía pidió ayuda a la embajada española para encontrar a su familia
Opinión
"Me llamó Carlos Fernando Bujol tengo 40 años y soy español", fueron las últimas palabras que alcanzó a decir un hombre, con el 90 por ciento de su cuerpo quemado, al momento de ser hallado por una joven, arrastrándose por la calzada de una calle de la zona de Perdís, a 18 kilómetros de Colpa Bélgica en Montero, Santa Cruz, el fin de semana. Éste es el terrible testimonio que brindó Karina P.C., la mujer que encontró al moribundo y que pidió auxilio de inmediato, pero en vano.
Un uniformado llegó hasta el lugar y oyó de labios del español la misma frase. El hombre fue auxiliado en una ambulancia, pero en el trayecto hacia el hospital más cercano, dejó de respirar.
TORTURA El médico forense José Luis Satt señaló que a la víctima no sólo le prendieron fuego, sino que fue torturada antes de ser quemada. El cadáver del extranjero tiene fracturas en costillas, en el esternón y un profundo corte en la pierna que hacen presumir a la Policía que sus agresores buscaban obtener alguna información de él y al no conseguirla, lo asesinaron. La causa real de la muerte no ha sido establecida, por lo que fue sometido a estudios toxicológicos y radiografías.
El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de Montero, Octavio Gutiérrez, que en la escena del crimen fue encontrada una botella plástica en la que estaba el combustible con el que rociaron a la víctima. También encontraron una zapatilla blanca Reebok que tardó en quemarse en los pies del español.
La Policía no pudo recolectar ningún documento que certifique la identidad del hombre. Por la saña con la que fue asesinado el hombre, los investigadores de Montero creen que la víctima fue conducida desde Santa Cruz hasta la zona de Perdís por al menos tres o cuatro personas en algún vehículo, para luego prenderle fuego y abandonarlo en el lugar. Nadie lo conoce en la zona de Colpa Bélgica.
Español fue torturado antes de ser quemado
Una mujer lo encontró en colpa, Bélgica. La víctima alcanzó a decir que se llamaba Carlos Fernando Bujol (40) y murió. No descartan ajuste de cuentas.
El Día
El primer informe forense apunta que el supuesto ciudadano español encontrado quemado este fin de semana en Colpa, Bélgica, fue torturado antes de ser quemado vivo. El estudio habría determinádo que el cadáver del extranjero Carlos Fernando Bujol (40) presentaba fracturas en costillas, esternón y un profundo corte en la pierna que hacen presumir a la Policía que sus agresores buscaban obtener alguna información de la víctima y como no lo consiguieron lo asesinaron.
"Aún no se ha determinado con exactitud la verdadera causa de la muerte por lo que se hará un estudio toxicológico y anatomía radiológica", explicó el forense.
Se arrastró hasta el camino. Según el jefe de la Felcc, en Montero, teniente coronel Octavio Gutiérrez, en la escena del crimen había señales que la víctima se arrastró por la calle de un extremo a otro para pedir auxilio hasta que fue encontrado casualmente por Karina P. C. a las 8.00, quien alertó a la Policía del hallazgo.
Murió camino al hospital. El informe policial señala que el extranjero aún se encontraba con vida cuando fue auxiliado por un policía. "Me llamó Carlos Fernando Bujol, tengo 40 años y soy español", fueron las últimas palabras que alcanzó a decir cuando era subido a una ambulancia y a los pocos minutos dejó de existir camino al hospital de Warnes.
Evidencias. Gutiérrez indicó que cercano a la escena del crimen se recolectó como evidencia una botella de plástico verde (Sprite) con la que se presume los asesinos llevaron gasolina para rociar al cuerpo del español. "Encontramos esta botella y una zapatilla color blanco marca Reebok que tardó en quemarse en los pies de la víctima", precisó.
La Policía no pudo recolectar ningún documento que certifique que Carlos Fernando Bujol es su verdadera identidad porque su cuerpo fue encontrado con el 90 por ciento de quemaduras.
Ajuste. Por la saña de cómo se desarrolló el crimen, los investigadores de Montero creen que la víctima fue conducida desde Santa Cruz hasta la zona de Perdís, distante a 18 kilómetros de Colpa, Bélgica, por al menos tres o cuatro individuos en vehículo para luego dejarlo abandonado en el lugar.
Un rastrillaje por el sector determinó que el español no tiene familia en el norte integrado y que tal vez radicaba en la ciudad.
Consulado. La autoridad policial confirmó que ya se tomó contacto con la embajada española en Santa Cruz para que ayude a determinar y ubicar el paradero de algún del extranjero ya sea en Bolivia o en su país. Sin embargo, en el consulado español indicaron que se encuentran a la espera del informe oficial de la Policía.
El cuerpo se encuentra depositado en la morgue del hospital.
Recogieron muestras dactilares
El jefe policial de montero confirmó que se han tomado las huellas dactilares de la víctima para que sean enviadas a su país.
50 Ejecuciones
Violentas se registraron los tres últimos años en Santa Cruz. La mayoría no fueron esclarecidas.
10 Asesinatos
Registró la Policía entre enero y abril de este año. Todos por ajuste de cuentas.