Finalmente, Evo Morales ha cedido a la principal demanda de la VIII Marcha Indígena, instruyendo a sus parlamentarios que incluyan en el proyecto de Ley del TIPNIS la prohibición expresa de construir la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos “o cualquier otra” por ese territorio.
De esta manera, el evismo sufre su tercera gran derrota, siendo la primera la derogación del decreto del “gasolinazo” el pasado 31 de diciembre y la segunda el rechazo popular a la elección de magistrados pro-oficialistas en los comicios del domingo, expresado en la victoria del voto nulo.
Salta a la vista que las derrotas se dan en un corto periodo de tiempo y con una creciente frecuencia, lo que sin duda nos habla de un acelerado proceso de descomposición política del régimen cocalero.
Fruto de estas derrotas, el evismo ha visto evaporarse su popularidad, al tiempo que su mando sobre la policía se ha visto debilitado, ha perdido los 2/3 del Órgano Legislativo (por la disidencia de los diputados indígenas), existe una rebelión generalizada de sus ex bases sociales, su imagen internacional se ha dañado seriamente y las redes de ONGs que antes militaban en el campo oficialista ahora asumen una postura crítica.
La ola expansiva de las sucesivas derrotas también arroja fuera del MAS a numerosos elementos, que detectan el cambio de los vientos y buscan un futuro reciclaje político…
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Trampas “en mesa”
Por supuesto, el gobierno no se quedará de brazos cruzados y es altamente probable que busque trampear a los indígenas del TIPNIS de alguna manera, algo que tienen muy presente los dirigentes de la CIDOB, quienes ya manifestaron que “no hay nada resuelto aún”.
En paralelo, el oficialismo busca minimizar la derrota del pasado domingo, con un sospechoso manejo de datos desde el sesgado Tribunal Supremo Electoral.
En ambos temas, el TIPNIS y los resultados de la votación, se necesitará de la vigilancia ciudadana y del periodismo independiente para denunciar las trampas “en mesa” con las que se pretenderá distorsionar lo perdido “en la cancha”…
Co-derrotados
Pero no sólo el gobierno de Evo Morales ha resultado derrotado en los últimos tiempos. También lo han sido supuestos opositores que ofrecieron un apoyo encubierto al MAS en las elecciones judiciales, así como rectores y analistas que hicieron campaña encubierta contra el voto nulo diciendo que era “un nuevo error de la oposición”…