Álvaro Riveros TejadaNoticias provenientes del ministerio de relaciones exteriores dan cuenta que en el salón principal de esa Cancillería y con la presencia del cuerpo diplomático acreditado en nuestro país, se procedió a ofrendar una mesa de Todos Santos en homenaje al alma del ex dictador de Libia Muamar Gadafi. La celebración se realizó cerca del mediodía, ante una mesa arreglada con gran cantidad de frutas, masas, dulces, las tradicionales tantawawas, cañas de azúcar y una abigarrada galería de fotografías de personajes de los más distintos credos y doctrinas como: El Che, Luis Espinal, Marcelo Quiroga, Mercedes Sosa, Ana María Campero y retratos de Bartolina Sisa, Tupac Katari y los angelitos del TIPNIS, los que junto a los difuntos de la Calancha, Caranavi y Pando habrían sido retirados a último momento, por no combinar con la decoración.Como es casi imposible la comunicación con estas almas que suelen venir en Off, habría sido un acontecimiento histórico poder entrevistarlas, especialmente a la del musulmán, para preguntarle si en su paso al Hades tuvo la ocasión de toparse con los millares de difuntos que él mandó a matar y la suerte corrida por los miles de millones de dólares que apercolló en su vida, como fruto de los 40 años de arduo trabajo como autócrata de su pueblo, y los depósitos de los ingenuos ahorristas que confiaron en él para depositar sus dineros mal habidos. Una pregunta similar al Che Guevara habría sido útil, para conocer el destino que corrieron las almas de los soldaditos asesinados en Ñancahuasú y otros tantos cristianos que él mandó a fusilar en la cárcel de la Cabaña en Cuba.Pero las cosas no quedan allí, en medio de ese atosigante sincretismo al que nos tiene acostumbrado el gobierno desde el 21 de enero del 2006, donde en medio de una espantosa mezcolanza nacida de la intangibilidad de una mamada se confunden mahometanismo con cristianismo, comunismo con capitalismo, Ku Klux Kan con pachamamismo, sólo han quedado vigentes los narcoamautas y en el santoral del MAS, beatos como: Santos Ramírez, San Miguel, Sanabria y Santisteban.Durante este nuevo ritual pagano, el recibimiento del alma de Gadafi fue acerbamente criticado por los sumos sacerdotes aimaras que aducen no haber respetado las creencias ancestrales de la cosmovisión andina, donde no está permitido recibir almas frescas, es decir: aquellas que fallecieron después de la primera quincena de octubre y por tanto, estas deberían hacer cola por lo menos por un lapso de seis meses. Tales observaciones, sin embargo, no lograron eco en la persona del sumo pontífice del pachamamismo, quien contra viento y marea salió con su extravagante gusto de ofrendar una mesa para Gadafi.