Incentivo petrolero costaría $us 1.044 millones por año al Estado boliviano

Proyecto de Ley de Hidrocarburos propone un fondo del TGE. El ex ministro de Hidrocarburos Guillermo Torres señala que si se aprueba la norma, el gasto será superior a la subvención y generará descontento en la población.

Incentivo petrolero costaría $us 1.044 millones por año

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Página Siete / La Paz



La posible creación de un Fondo de Incentivo Petrolero (FIP) le costaría al Tesoro General del Estado unos 1.044 millones de dólares por año si el precio interno de los hidrocarburos no se incrementa. Ello está incluido en una propuesta de Ley de Hidrocarburos que analizan las autoridades del sector.

El anteproyecto de ley al que accedió Página Siete establece en su artículo 156: “Créase el FIP, destinado a incrementar la retribución del titular productor de petróleo crudo, el mismo que será financiado en la forma que a continuación se indica: a) Si de acuerdo a la política del Estado, el precio de referencia del petróleo es menor al Precio de Paridad de Exportación de dicho hidrocarburo, el FIP será financiado por el TGN”.

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El Precio de Paridad de Exportación es el precio internacional del barril de crudo en el mercado bursátil West Texas Intermediate (WTI, en inglés), menos todos los gastos hechos para llevarlo al punto de venta; éstos en la actualidad bordean al menos siete dólares por cada barril WTI.

Si tomamos la cotización actual de 98,6 dólares por barril WTI y le restamos esos siete dólares, el costo de un barril en boca de pozo queda valuado en unos 91 dólares.

Este precio tiene una diferencia de 64,5 dólares con los 27 dólares que cuesta cada barril en el mercado interno, y ese monto deberá ir a parar al financiamiento del mencionado fondo, en caso de que la nueva ley se apruebe como está hasta ahora.

El Boletín Estadístico publicado por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) señala que el país produjo un promedio de 44.370 BPD de enero a septiembre de 2011, mientras que en similar lapso de 2010 los volúmenes producidos alcanzaron los 41.580 BPD (ver infograma).

Si se multiplica 44.370 BPD por 64,5 resultan 2,9 millones que por día debería erogar el TGE. Y si multiplicamos ese monto por los 365 días del año, se deduce que al menos 1.044 millones de dólares de dinero público irían al financiamiento del FIP, señala un análisis del ex ministro de Hidrocarburos Guillermo Torres.

“Este monto resulta incluso superior a los 700 millones de dólares que costará la subvención de los combustibles para el próximo año”. Y añade que de pagarse ese monto a las petroleras, “los departamentos, municipios y universidades reclamarán del Estado el pago superior de regalías, en vista de que se pagará más a las petroleras por la producción de crudo”, añadió.

Según la ex autoridad, si se aprueba una norma así, “se armará todo un problema porque además la población se negará a solventar a las empresas y peor los departamentos productores; se estará beneficiando demasiado a las petroleras”.

En diciembre de 2010, cuando el Gobierno aprobó el Decreto Supremo 748, que levantaba la subvención a los carburantes, quería incentivar la producción de petróleo y frenar la creciente importación de combustibles.

El vicepresidente Álvaro García Linera para justificar la medida señaló que las empresas no querían explotar el petróleo porque no era rentable, porque en el país el barril está en 27 dólares, cuando en el mercado externo se cotizaba a 90 dólares.

Costos petroleros

Subvención. El precio del petróleo en el mercado interno está congelado en 27 dólares el barril hace más de seis años, mientras que a nivel internacional cuesta 90 dólares.

Petroleras. Las empresas operadoras de los campos no aumentan producción debido a los bajos precios del crudo en el país; tampoco resulta conveniente hacer exploración de petróleo si se vende a los precios actuales.

Gasolinazo. El Gobierno decretó en diciembre un aumento de precios al diésel, la gasolina, la gasolina especial y la gasolina de aviación para frenar el contrabando e incentivar la producción petrolera.

Justificación. La nivelación de precios buscaba “proteger la economía boliviana”, según el vicepresidente Álvaro García Linera.

Gasolina. El litro de gasolina subió de 3,74 bolivianos a 6,47 bolivianos; la gasolina especial de 4,79 a 7,51 bolivianos y el diésel de 3,72 a 6,80 bolivianos.

Costo. La subvención de los combustibles subió de 80 millones de dólares en 2005 a 380 millones en 2010. Para 2012 se prevé que la subvención llegará a 700 millones de dólares.

Punto de vista

“Se incentivará pero seguiremos importando”

Bernardo Prado – hidrocarburosbolivia.com

La creación de este Fondo de Incentivo Petrolero busca lograr que las petroleras suban su producción. Ese incentivo es muy difícil de calcular porque tendríamos que saber cuánto deben incrementar su producción las empresas para saber cuánto les vamos a pagar por esa producción. Lo que al parecer se busca con la creación de este fondo es crear un incentivo que minimice el impacto de la variación de los precios internacionales del petróleo y de sus derivados en la población.

Ésta es una buena medida desde el punto de vista de que las empresas operadoras podrán recibir más plata por su producción de petróleo, si bien no sabemos el monto y tampoco creo que el Gobierno lo haya estimado aún. Pero si se quiere incentivar la producción de petróleo al interior del país es una buena medida porque las petroleras van a recibir mucho más dinero.

El fondo pagaría alas petroleras por unos años. Pero hasta que se incremente la producción de petróleo, el Estado deberá seguir importando gasolina, diésel y gas licuado, por lo tanto será un gasto doble.

Porque no es que se dejará de importar combustibles desde el momento en que se pague más a las petroleras, eso tomará tiempo y mientras tanto el Estado debe seguir importando y subvencionando.

Pero lo que queda claro es que las petroleras van a ganar más y van a subir la producción de petróleo. Esto de alguna u otra manera sigue siendo un subsidio porque no existe ningún fondo que a la larga pueda disimular el verdadero impacto de los precios internacionales en la población.

Es posible que el Estado no le dé este fondo directamente a las petroleras, sino a las refinerías, para que éstas compren el crudo a un precio más elevado de lo actual y, como cada barril ya no será a 27 dólares sino más, entonces ya hay negocio para las petroleras.