Un futbolista de otro planeta’, fue la frase con la que definieron a Ronaldinho durante la distinción que el Gobierno boliviano, mediante el presidente Evo Morales, hizo a la estrella brasileña, que antes fue distinguida por la Gobernación de Chuquisaca y después por la Alcaldía de Sucre. El Mandatario boliviano homenajeó al futbolista entregándole la Medalla al Mérito Deportivo, en el grado de Forjador del Deporte. “Aprovechamos esta oportunidad para hacer un pequeño reconocimiento, con mucho respeto, humildad y mucha admiración a Ronaldinho, un futbolista que nos deslumbró con sus goles y gambetas, que nos hizo disfrutar de su fútbol”, destacó Morales.
También elogió al entrenador del Flamengo y extécnico del seleccionado brasileño, Wanderlei Luxemburgo; lo mismo hizo en el caso del club Flamengo. “Me honra recibir este homenaje. Agradezco la hospitalidad del pueblo boliviano y voy a trabajar para continuar así. Espero volver más seguido a Bolivia y alegrar al pueblo”, sostuvo por su lado el afamado delantero brasileño. Luego de imponer la medalla dorada, tanto Morales como Ronaldinho intercambiaron presentes, con diversas casacas. Morales le entregó una camiseta de la selección boliviana, mientras que R10 le dio una casaca suya del Flamengo con la número ‘10’.
En la ceremonia estuvieron el viceministro de Deportes, Miguel Ángel Rimba, y el entrenador Luxemburgo, quien también agradeció la hospitalidad boliviana. “Bolivia sabe reconocer a sus amigos, a nuestros líderes, deportistas y otros que siguen forjándose desde Sudamérica, desde Brasil para aportar al fútbol mundial”, argumentó el mandatario Morales. Alcaldía .
El Gobierno Municipal de Sucre, a través de la alcaldesa Verónica Berríos, también reconoció a Ronaldinho Gaúcho con la Medalla de Honor Huésped Ilustre de la ciudad. La distinción se la efectuó poco antes de comenzar el partido entre Flamengo y Universitario, en el camarín del estadio Patria. Ya durante el encuentro, el ídolo brasileño también recibió el cariño popular de la afición, tal como ocurrió durante los días anteriores, desde que el Flamengo pisó suelo chuquisaqueño, cuando fue aclamado desde su arribo al aeropuerto Juana Azurduy de Padilla.
Fuente: Posdata.
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