El presidente del Estado Plurinacional Evo Morales sigue equivocándose en la relación con Brasil al pedirle al Gobierno de la Presidenta Dilma Rousseff le “devuelva” al senador Roger Pinto (CN), declaró el jefe de la Bancada de Diputados de Convergencia Nacional (CN), Adrián Oliva. Pinto se encuentra en territorio brasileño desde el pasado sábado gracias a un operativo llevado adelante por funcionarios de la Embajada del vecino país en La Paz.
“Es penoso oír expresiones del presidente Morales plagadas de rencor personal hacia un senador opositor perdiendo de vista el valor, importancia y trascendencia de las relaciones con Brasil”, dijo Oliva recordando que diplomáticos de Brasil y ahora su presidenta señalaron que ellos insistieron en pedir al Gobierno de Bolivia que otorgue a Pinto un salvoconducto, situación que fue negada por lo que se hizo prevalecer un derecho fundamental que es el derecho a la vida.
El diputado opositor considera que la declaración del presidente Morales sólo sirvió para que pueda expresar su molestia hacia la decisión tomada por Brasil respecto a Pinto y a la explicación que dio la Presidenta Rousseff, porque un día antes el Canciller David Choquehuanca anunció que se estaba pidiendo explicaciones por escrito y de carácter oficial a las autoridades brasileñas sobre lo ocurrido.
Para el legislador tarijeño el gobierno y diplomacia bolivianos debieran aceptar el consejo de diplomáticos bolivianos de trayectoria que recomiendan “dar vuelta la página” al caso Pinto y más bien enfrascarse en refrescar las relaciones con Brasil abordando otra agenda vital para la relación bilateral, uno de cuyos temas es la renegociación sobre el precio del gas natural ya que el actual contrato que vence en 2019.
“Es clave para encarar esta renovación y una nueva etapa en las relaciones dotar a nuestra embajada en Brasil de personal profesional en el campo diplomático y que además pueda expresarse y comunicarse en portugués, lo que no sucede al presente”, dijo Oliva al precisar que los recursos generados por la venta del gas natural son los que sostienen la bonanza económica de la actual gestión gubernamental, que desde enero a julio alcanzaron los 3.537 millones.
“Ese interés nacional es más importante que los rencores personales”, insistió el legislador.
Otros temas pendientes con Brasil son la devolución de los vehículos robados en su territorio y que fueron recuperados en Bolivia, el Gobierno se comprometió a devolver los vehículos recuperados, pero ello no sucedió. En segundo lugar, existe un conflicto suscitado por la toma de tierras que pertenecen a súbditos brasileños en el departamento de Santa Cruz. En tercer lugar, reasentamientos en Pando y la titulación de tierras.
En cuarto lugar, que se aseguren las inversiones de empresarios brasileños en Bolivia, porque se quejan de falta de seguridad jurídica. En contraparte también existen algunos temas observados por el Gobierno de Bolivia como la construcción de represas en la frontera amazónica de Brasil, que podrían provocar inundaciones y otros problemas para los bolivianos.