Revolución mestiza y etno-jacobinismo

viceDe acuerdo a los datos del Censo que acaban de conocerse, en octubre de 2012 los bolivianos se rebelaron contra el proyecto etnojacobino de Evo Morales y Álvaro García Linera, mediante el sencillo expediente de negarse a ser identificados como parte de algún pueblo indígena.Fue la revolución mestiza, silenciosa sí, pero que puede tener enormes consecuencias.Para empezar, el 58% de ciudadanos que se negaron a ser divididos o clasificados según pertenencias étnicas han puesto en entredicho la concepción misma de plurinacionalidad, que permea de forma transversal la nueva Constitución Política del Estado.Todo indica que el concepto de multiculturalidad, compatible con la nacionalidad única, interpreta mejor la estructura identitaria de Bolivia.En vano el presidente y el vice ensayan por estos días diversos juegos verbales para tratar de distorsionar la prístina realidad, hablando de “identidades nacionales compuestas” o afirmando que “todos somos originarios”.Lo cierto es que la estantería ideológica se cayó, desnudando al proyecto aymaracéntrico como lo que era: la máscara asumida por el trust cocalero para encubrir su acceso al poder y la consolidación de su hegemonía…[email protected]