Venezuela logra que Unasur trate su crisis interna en Chile

Maduro asegura que el conflicto será resuelto por los venezolanos sin ayuda internacional. La OEA rechaza la violencia y pide respeto a los derechos humanos, pero no condena al Gobierno

Amnistía Internacional alertó por la situación de los derechos humanos en Venezuela. Foto: AFP



Carlos Morales y Agencias – [email protected]

Mientras los países de la Organización de Estados Americanos (OEA) retomaron ayer el debate sobre la crisis en Venezuela, el Gobierno de Nicolás Maduro confirmó que los cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se reunirán la semana próxima en Chile y que allí explicará «esta nueva agresión a la democracia venezolana».

La reunión de cancilleres tendrá lugar el 12 de marzo en Santiago de Chile, un día después de la asunción de Michelle Bachelet, según señaló el canciller venezolano, Elías Jaua, que aseguró haber recibido confirmación del presidente pro tempore de la Unasur, actualmente Surinam.

El Gobierno venezolano defiende que Unasur es el ámbito donde debe tratarse la situación en Venezuela, donde han muerto 21 personas, dos centenares han resultado heridas y hay decenas de detenidos en incidentes relacionados con las protestas antigubernamentales que se suceden desde hace tres semanas.

Ayer, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, reiteró que su país «no necesita una mediación» para salir de la crisis en la que está sumido y pidió poner fin a las «conspiraciones» del Gobierno estadounidense para «reconquistar» América Latina, durante una entrevista con CNN.

«Tengo una responsabilidad por todo lo que está ocurriendo en mi país, por eso soy el presidente. Asumo la responsabilidad», dijo también Maduro en la entrevista concedida a la periodista Christiane Amanpour, quien le preguntó si aceptaría la mediación del papa Francisco.

Según Maduro, los que se han manifestado en contra de su Gobierno en las últimas semanas «son una minoría».

Maduro afirmó que busca el «respeto» para su país y diálogo con Estados Unidos, pese a las diferencias en las últimas semanas.

Choque Maduro-Biden

La reunión de Unasur tendrá precisamente lugar en el marco de la asunción de Bachelet, a la que ya han confirmado su asistencia la mayoría de los presidentes de Sudamérica y de otros países latinoamericanos.

Según el embajador venezolano en Santiago, también tiene previsto asistir el presidente Nicolás Maduro.

Si acude coincidirá con el vicepresidente de EEUU, Joseph Biden, cuya agenda en Chile va a tener como prioridad el tema de Venezuela, según indicó ayer un alto funcionario de la Casa Blanca.

La presidenta electa de Chile, Michelle Bachelet, afirmó que su futuro Gobierno ofrecerá apoyo al Gobierno y al pueblo venezolano para encontrar una salida democrática a la crisis.

Naufraga el debate en la OEA

Ayer, los países de la OEA intentaban conciliar posiciones alrededor de una resolución sobre la situación de violencia en Venezuela, al reanudarse una reunión extraordinaria a puertas cerradas del Consejo Permanente, que se suspendió la madrugada por falta de acuerdos.

Tras ocho horas de debates el jueves, las delegaciones de los 34 países de la OEA se preparaban para votar enmiendas a una propuesta boliviana para condenar la violencia, llamar a un diálogo y el respeto de los derechos humanos en Venezuela sin acusar al Gobierno de Maduro

ANÁLISIS

La Carta Democrática está en juego
Armando Loayza – Excanciller

El conflicto social se le puede ir de las manos a Nicolás Maduro y con pleno derecho los países de la región buscan una salida al conflicto venezolano. Por eso, la OEA – en base a la Carta Democrática – tiene plenas competencias para tratar la crisis en Venezuela, no hay que olvidar que se está hablando de un riesgo para la democracia y los derechos humanos en ese país.

A todas luces es un exceso del Gobierno de Maduro no acatar la acción de la OEA por el simple prejuicio de que detrás de ese organismo internacional estaría Estados Unidos.

El Consejo Permanente de la OEA es el órgano competente para debatir estos problemas y no así la Unasur, dado que se trata de un grupo de países amigos pero sin competencias para actuar en este tipo de conflictos.

Si somos coherentes con la Carta Democrática, todos los temas que perturben la paz regional deben discutirse ante la OEA.

Venezuela ha querido evitar un análisis del problema en el ámbito interamericano y, en la región, hay una suerte de división sobre el caso. Chile, Panamá y Colombia no están de acuerdo con el planteo venezolano, mientras que Venezuela se apoya en sus aliados de la ALBA para llevar el caso ante la Unasur. Sin embargo, este organismo no tiene capacidad de establecer una investigación o de mediación para la conciliación de las partes.

Evidentemente, este es un problema interno, pero al estar en juego la democracia y los derechos humanos, el asunto concierne a toda la región

Reacciones

Panamá exige $us 1.000 millones
El gobierno venezolano de Nicolás Maduro debe pagarle a Panamá más de $us 1.000 millones en deudas, advirtió el mandatario de Panamá, Ricardo Martinelli, quien sospecha que la actual crisis diplomática es una excusa para no pagar.

La SIP alerta por violaciones
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que agrupa a los dueños de periódicos de la región, denunció la «violación del ejercicio periodístico» registrado en Venezuela, en un contexto de «represión gubernamental de la libertad de prensa» y de «criminalización de la protesta”.

Fuente: El Deber.