¿Anorgasmia? 10 consejos para mejorar el tratamiento

Si has sido diagnosticada con esta disfunción sexual ¡no caigas en pánico! Tenemos excelentes tips para que te olvides de ese fantasma.

La anorgasmia puede deberse a factores físicos o emocionales

Mucho se habla del orgasmo femenino, como si fuera el desconocido más grande para los hombres y también para muchas mujeres. El orgasmo es ese momento de clímax que hace que la vida sexual, no necesariamente en pareja, explote en cuestión de sensaciones y, ¿por qué no?, de sentimientos, incluso por nosotras mismas. Pero este invitado ha sido sobrevalorado, llevando a las mujeres a pensar que no vale la pena la relación sexual o bien la masturbación, si no hay orgasmo.La verdad es que no es cierto, el orgasmo es la cereza en el pastel de cualquier vida sexual, pero en él no debe basarse lo que sentimos hacia nosotras mismas ni mucho menos, hacia la pareja. Es cierto que hay mujeres que debido a problemas mentales o médicos no son capaces de sentir orgasmos, pero eso no las hace más ni menos, solo diferentes.Según información del sitio belelu.com, la anorgasmia es una disfunción sexual que se distingue por nunca haber experimentado un orgasmo, a pesar de tener estimulación de intensidad normal, ya sea en pareja o no.De acuerdo con el portal web tuguiasexual.com, la anorgasmia se divide en varios tipos, debido a los factores que podrían estar provocándola:

  1. Enfermedades o causas orgánicas: La anorgasmia se debe a un padecimiento físico, como por ejemplo, la diabetes, tumores o incluso causas como problemas en la tiroides. O bien, debido a un funcionamiento irregular de un órgano sexual.
  2. Causas psicológicas: Situaciones como el machismo, la represión sexual, haber sufrido un trauma como una violación o una relación violenta, pueden originar un bloqueo a nivel mental.
  3. Anorgasmia primaria: Se refiere a que nunca has sentido un orgasmo, ni con la relación sexual ni a través de la masturbación.
  4. Anorgasmia Secundaria: Has tenido orgasmos, pero solo debido a la masturbación, no por la penetración.

Lo más importante, en primer lugar, es acudir a un médico, para que él pueda comentarnos cuál sería el tipo de disfunción que presentas. No te dejes llevar por comentarios de amistades o incluso de la pareja, en lugar de esto, consulta con un especialista.Si has comprobado que no se trata de un problema a nivel médico, es momento de poner manos a la obras y comenzar a ayudar al tratamiento, es por eso que De10.mx trae para ti 10 consejos para darle batalla a la anorgasmia…Con información de tuguiasexual.com y belelu.com



Explórate: No sabrás que te gusta o qué no, si no te conoces. Mírate desnuda frente al espejo y haz las paces con tu cuerpo. Entra en contacto con tu intimidad y descúbrete cómo eres. No sientas pena, piensa en que así será más fácil descubrir como si o como no te gusta.

Auto estimúlate: Toca tus senos, tu clítoris, tu cabello y sigue con lo que más te agrade. Así sabrás dónde te gusta que te toquen o cómo te masturben. Podrás orientar a tu pareja para que conozcan la situación en la que se encuentran en el placer.

Calentamiento: Si tienes pareja, no busques de inmediato la penetración. Busca el tiempo de caricias con tu chico, deja que te toque y disfruta la excitación que produce. La penetración deberá llegar en el momento en que más cómoda o pasional te sientas.

Negatividad ¡fuera!: No te alimentes de sentimientos de impotencia o de que las cosas no saldrán bien. Lo primero que necesitas es una mente abierta para poder después ponerte en contacto y trabajar en lo que deseas lograr, en este caso: el orgasmo.

Conocimiento: Es básico que sepas quién eres en general y en la cama. Si no te sientes cómoda tomando un rol, por ejemplo, de dominatriz, no te sientas obligada a hacerlo. Si te interesa disfrazarte o te gustaría que tu pareja lo hiciera, ¡hazlo!

Explóralo a él: Si estás en pareja, lo primero que deberás entender es que este es un viaje compartido. Si él está intentando complacerte, también complácelo. Se proactiva. Prueba cosas que no has hecho. Disfrútalo en la cama o en la cocina o donde sea posible.

Toma tu tiempo: No te acostumbres al rapidín. Claro es perfecto en algunas situaciones, pero mejor trata de tener tiempo en tu agenda; que no te interrumpa una llamada telefónica ni el llanto de tu hijo. Busca tiempo para estar contigo y con tu pareja.

Usa lubricantes: Utilizar estas herramientas te permitirá relajar los músculos vaginales, lo cual ayudará a potencializar las caricias o la penetración. No los descartes como aliados contra la anorgasmia, además estarás experimentando con algo nuevo.

Haz ejercicio: Existen prácticas que te ayudan a fortalecer los órganos sexuales e incluso partes del cuerpo, como los muslos y la cadera, para que puedas sentirte más relajada mientras inicias la búsqueda por el orgasmo. Además te ayudarán a concentrarte.

No te obsesiones: Como lo mencionamos, el orgasmo es el postre del bufete del sexo. Es normal que desees sentirlo, pero tu mente puede jugarte trucos sucios y hacer que no prestes atención ni al amor ni al momento. Sí trabaja en ello, pero ten mucho cuidado.

Fuente: de10.mx