El embajador de Uruguay en Bolivia, Carlos Flanagan, sostuvo este sábado que esta legación diplomática no puede interferir de ningún modo en el proceso de extradición al país del acusado del caso terrorismo Alejandro Melgar. Sin embargo, explicó que el poder judicial de su nación analiza esta posibilidad.
Melgar era el abogado de la Cámara de Industria y Comercio (Cainco) y escapó del país tras ser vinculado con el grupo del húngaro Eduardo Rózsa, líder de la presunta célula terrorista. En abril de 2012 fue detenido en un aeropuerto de Uruguay por la Policía Internacional (Interpol), cuando intentaba viajar a Brasilia, capital de Brasil. Actualmente Melgar está recluido en una prisión del país oriental.
El ex fiscal del caso Terrorismo, Marcelo Soza, acusó a Melgar de estar implicado en la presunta conformación de la supuesta célula terrorista liderada por Rózsa, quien falleció en el hotel Las Américas de Santa Cruz, el 16 de abril de 2009, junto al irlandés Michael Dwyer y el húngaro Arpád Magyarosi, en un operativo realizado por la Policía boliviana.
"No debemos interferir (la Embajada) en un tema que es privativo del poder judicial. El caso Melgar está en la órbita de nuestro poder judicial y son ellos quienes, de acuerdo a los tiempos que estimen convenientes, definirán en definitiva el destino", indicó el diplomático en entrevista con la ANF. El fiscal Marco Antonio Rodríguez informó en pasados días que la extradición de Melgar está en manos de la Corte Suprema de Justicia de Uruguay. Para el Ministerio Público, Melgar es una "pieza clave" del grupo de Eduardo Rózsa.
El Ministerio Público de Bolivia declaró rebelde a Melgar junto a otras personas del ámbito cruceño, entre ellos Branko Marinkovic, ex presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, dentro del proceso judicial del caso terrorismo.
ANF
Fuente: eldeber.com.bo