El debate interno por estos días en el oficialismo se refiere a quiénes deberán ser los candidatos principales en los comicios regionales de marzo 2015. Los defensores de postulaciones estrictamente partidarias -básicamente, la dirigencia de los “movimientos sociales”- ha quedado en jaque luego de que el caudillo Evo Morales dictaminara que debe escogerse a candidatos “populares” (conocidos), sin importar que no sean militantes del MAS.Ante todo se busca el voto de clase media, para lo cual se apostaría a “personalidades”, probablemente con algún tipo de fama o posicionamiento mediático previo.El camino elegido muestra, por una parte, la escasez de cuadros internos en el Movimiento Al Socialismo para acometer las elecciones departamentales y municipales, y al mismo tiempo la paulatina conversión del oficialismo en un partido “catch-all” (agarra-todo).En rigor, la senda ya fue recorrida en las recientes elecciones nacionales, con resultados más bien pobres: los postulantes “invitados” como uninominales no lograron en general la victoria. Igualmente, en los comicios regionales del 2010 se ensayó también la fórmula, con pocos logros.El tema de fondo parece ser el caudillismo: el único candidato del MAS con verdadero arrastre sigue siendo Evo Morales y en su ausencia se debilita de forma notable la performance del partido gobiernista…[email protected]