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El mandatario afirmó que una revolución no puede dejar sus actividades «en manos de la burguesía parasitaria». El presidente de Venezuela perdió los estribos cuando un grupo de trabajadores se puso de pie mientras él pronunciaba su discurso. “¡Disciplina!”, “¡Pónganse las pilas!”, “¡Esto no es un evento artístico!”, gritó ofuscado. “Qué pasa con las banderas blancas … estamos haciendo un pacto de sangre o qué”, se molestó el presidente de Venezuela en el Congreso Obrero celebrado en caracas y transmitido por cadena nacional en todo el país.
A la primera frase de enojo se le sumaron más, hasta que se lo escuchó y vio muy enojado al bolivariano: “¿Ustedes me van a exigir a mí que le eche bola toda la semana y ustedes se van a parar en una asamblea? Los actos no son un evento artístico. O nos paramos y nos vamos todos”. El mandatario afirmó que una revolución no puede dejar sus actividades “en manos de la burguesía parasitaria”.
Afirmó que cada palabra tiene que ser un compromiso, “un pacto de sangre con la patria”. “Yo no vine a este Congreso a tirar discursos para tener aplausos de ustedes, yo vine a sellar un pacto de sangre con la clase obrera para tirar una ofensiva socialista”, insistió. Según detallaron los diarios locales, Maduro felicitó a los organizadores de la clausura del 1º Congreso de la Clase Obrera, por el trabajo desempeñado durante las últimas semanas. “Aquí está presente en pleno, el Consejo de Ministros revolucionario del Gobierno bolivariano.
Venimos a asumir compromisos, a sellar un pacto de vida, de trabajo, no es cualquier momento en la historia que estamos viviendo”. Maduro aprobó todas las propuestas que hicieron los trabajadores “y que han llevado adelante este Congreso como Plan de Gobierno (…) los trabajadores son el centro mismo de la revolución, sin trabajadores no hay patria, no hay vida, no hay economía, no hay revolución posible, y menos revolución socialista”.
Fuente: Unitel, notihoy.com