La Paz, Bolivia. Una subsidiaria del poderoso grupo empresarial chileno Luksic registró la marca Zingani con fines de evitar que el reconocido y único singani boliviano ingrese al mercado del vecino país, según da a conocer el reportaje principal de la revista Oxígeno, en su edición de noviembre.
El tema en cuestión en la izquierda de la portada de Oxígeno
El chuflay y el yungueñito le deben su existencia al singani, ese aguardiente elaborado únicamente en Bolivia a base de uvas de Moscatel de Alejandría. Ahora, como resultado de la mejora en su elaboración, se aconseja beberlo puro, sin combinaciones, como ocurre con el brandy. Así como no hay dudas sobre el origen del Champagne, no las hay sobre el origen del singani; un producto de los valles de Bolivia, desde donde se ha proyectado al mundo entero, señala el reportaje de la revista Oxígeno.
“La Compañía Pisquera de Chile, que nació el 2005 como resultado de la alianza entre la poderosa Cervecerías Unidas y la Cooperativa Agrícola Control, ha registrado la marca ‘Zingani’ como un producto de origen chileno. Perteneciente al grupo empresarial chileno Luksic; la CCU registró al zingani, así con Z, como una marca para proteger derechos sobre usos agrícolas, según se lee en Unibrander, el buscador universal de marcas», dice una de las partes más importantes del reportaje.
Fuente: Oxígeno