La marcha en París que reunió a varios jefes de Estado en defensa de la libertad de prensa fue memorable, entre otras cosas por haber reunido al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y al presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas.Pero hubo notorias ausencias. La de Barack Obama, por ejemplo, cuya inasistencia “es un símbolo de la falta de liderazgo de Estados Unidos en el escenario mundial”, al decir del senador norteamericano Ted Cruz.O la de los presidentes de varias “democraduras” latinoamericanas, siempre prestos a la búsqueda de protagonismos -a veces vociferantes- en los foros internacionales, pero que le esquivaron el cuerpo a la cita parisina.Tal vez porque en el fondo no creen en la libertad de prensa o quizás para no irritar a sus aliados islamo-fascistas.Es el caso del presidente Evo Morales, que apenas envió un tibio comunicado de “solidaridad” con Francia que no incluía una clara condena de la masacre terrorista de días pasados, y cuya ministra de comunicación emitió lamentables comentarios criticando las caricaturas de Charlie Hebdo…[email protected]