12 frases célebres de George Washington

La Independencia de Estados Unidos Para ver  todas las fotos haz click aquí

George Washington (1732 – 1799) fue un militar que se convirtió en el primer Presidente de los Estados Unidos (1789 – 1797) y Comandante en jefe del Ejército Continental de las fuerzas revolucionarias en la Guerra de la Independencia de los Estados Unidos (1775–1783).

 



Washington es junto John Adams, Benjamin Franklin o Thomas Jefferson, uno de los Padres Fundadores de los Estados Unidos.

 

Tras perfilar en la Convención de Filadelfia de 1787 la Constitución de los Estados Unidos de América, dos años después sería elegido de forma unánime y sin discusión como el primer presidente de los Estados Unidos. Desde entonces evitó los conflictos bélicos y se centró en establecer muchas políticas y tradiciones que aún hoy perduran. En las elecciones de 1792 obtuvo de nuevo el 100% de los votos electorales, siendo el único presidente que ha recibido tan representativo apoyo.

 

Lo curioso es que Washington no formó parte de ningún partido político. Fueron sus asesores los que formarían posteriormente dos facciones distintas, allanando el camino para el futuro sistema de partidos.

 

El primer presidente de los Estados Unidos murió en 1799 a la edad de 67 años, a causa del tratamiento para su neumonía; la pérdida de una gran cantidad de sangre por culpa de las sangrías, la asfixia y la deshidratación fueron entre todas, las responsables. A su muerte se dijo que fue «primero en la guerra, primero en la paz y primero en el corazón de sus compatriotas”.

 

Os dejamos con sus frases más célebres:

 

“La libertad, cuando empieza a echar raíces, es una planta de rápido crecimiento”.

 

“Trabaja para mantener viva en tu pecho esa pequeña chispa de fuego celeste, la conciencia”.

 

“El gobierno no es una razón, tampoco es elocuencia, es fuerza. Opera como el fuego; es un sirviente peligroso y un amo temible; en ningún momento se debe permitir que manos irresponsables lo controlen”.

 

“No hay que mirar hacia atrás a menos que sea para obtener lecciones útiles de los errores del pasado, y con el propósito de aprovecharse de la experiencia que tan cara ha costado”.

 

“Asóciate con hombres de calidad si estimas tu propia reputación; pues es mejor estar solo que mal acompañado”.

 

“Cuando hables de Dios o de sus atributos, hazlo con toda seriedad y reverencia”.

 

“Es imposible gobernar rectamente al mundo sin Dios y sin la Biblia”.

 

“La religión y la moralidad son pilares esenciales de la sociedad civil”.

 

“Espero tener siempre suficiente firmeza y virtud para conservar lo que considero que es el más envidiable de todos los títulos: el carácter de Hombre Honrado”.

 

“La verdadera amistad es planta de lento crecimiento que debe sufrir y vencer los embates del infortunio antes de que sus frutos lleguen a completa madurez”.

 

“Perseverar en el cumplimiento de su deber y guardar silencio es la mejor respuesta a la calumnia”.

 

“Nada aborrezco más que la ingratitud”.

 

Fuente: muyinteresante.es