Un juez federal ordenó la sanción económica para Eike Batista y su círculo más cercano en el marco de un proceso por manipulación de mercado.
Los fiscales ya habían congelado en septiembre unos u$s635 millones de activos de Batista, que enfrenta acusaciones por asociación ilícita, inducción al error y falsedad ideológica en Río de Janeiro y San Pablo.
Pero ahora el bloqueo de capitales, inmuebles, vehículos y embarcaciones se extiende también a sus familiares próximos -dos de sus hijos, su esposa y su ex mujer- hasta un valor de 3.000 millones de reales (unos u$s1.094 millones al cambio actual).
El juez federal Flavio Roberto de Souza pretende garantizar así la compensación de daños a los inversores en la empresa petrolera de Batista, según recoge el diario O Estado de Sao Paulo. Este magistrado preside el juicio contra el empresario por uso de información privilegiada, que se inició en noviembre en Rio.
El hombre de negocios de 58 años de edad, quien llegó a amasar una fortuna de u$s30.000 millones producto de negocios en minería y petróleo, es acusado de manipulación del mercado de valores mediante el uso indebido de información privilegiada al vender acciones de su compañía.
Batista supuestamente engañó a inversionistas en un plan para atraer u$s1.000 millones a su empresa petrolera OGX (hoy Ogpar), cuyas metas de producción eran extremadamente optimistas, pese a que muchos de sus pozos finalmente no poseían el potencial de producción proyectado en un principio.
Cuando la falta de producción de sus pozos se volvió un hecho, la empresa de Batista se declaró en quiebra en octubre de 2013, en medio de deudas que alcanzaban los u$s5.000 millones. El pasado 27 de enero, Batista abandonó la presidencia y su silla en el consejo de Ogpar, donde ya había perdido una posición dominante tras recurrir a la protección judicial para evitar la quiebra.
A Batista se le acusa de manipular el mercado con la venta de millones de acciones de OGX justo antes de que la firma anunciara que suspendía el desarrollo de las únicas tres reservas que sí producían petróleo. El magnate dice que vendió esos papeles para cumplir con pagos de deudas y que fue engañado por los directivos sobre la potencial riqueza de los pozos.
Fuente: www.infobae.com