Tras la intervención en el hotel Las Américas. El fiscal general de Bolivia, Ramiro Guerrero informó que el retraso se debe a los recursos interpuestos por los defensores de los acusados.
El fiscal general del Estado, Ramiro Guerrero.
Página Siete / La Paz
El fiscal general Ramiro Guerrero informó que en seis años los acusados del caso terrorismo presentaron 220 incidentes que retrasaron el proceso.
Hace seis años se dio una intervención en el hotel Las Américas de Santa Cruz, en la que, según la versión del Gobierno, se desarticuló una banda separatista.
«En el transcurso de ese proceso, la defensa ha presentado más de 220 incidentes y excepciones. Se ha hecho una acusación, hay cinco personas que han ido a un procedimiento abreviado que tienen sentencia y hoy está el juicio oral en parte probatoria”, detalló Guerrero, según la agencia de noticias ABI.
Explicó que el retraso en el juicio por el caso terrorismo se debe a las excepciones, incidentes y otros. «Además de las constantes enfermedades de los hoy acusados. Esa es la situación, por eso, desde el Ministerio Público, somos los primeros interesados de que ese proceso debe terminar”, aseveró el fiscal.
El presidente del Tribunal Primero de Sentencia, Sixto Fernández, dijo que sólo resta avanzar un 20% en el juicio para dictar sentencia contra todos.
Actualmente, hay cinco personas que se acogieron a un procedimiento abreviado, reconocieron las acusaciones que pesaban contra ellos y recibieron una sentencia.
La primera fue contra Ignacio Villa Vargas, alias El Viejo, que recibió una pena de ocho años de presidio; luego, contra el exasesor de Branko Marinkovic, Juan Kudelka, que recibió seis años y nueve meses.
Después, Mario Tadic y Elöd Tóásó recibieron cinco años y 10 meses de presidio; y a inicios de marzo, el Tribunal Primero de Sentencia de La Paz condenó a siete años de prisión al excoronel del Ejército Zoilo Salces Sepúlveda, acusado de alzamiento armado contra la seguridad y soberanía, por complicidad.
Melgar
El fiscal Guerrero considera que Alejandro Melgar es pieza clave en este proceso, porque habría financiado al grupo terrorista.
Por esta razón, el Gobierno solicitó su extradición a Uruguay y este país aceptó la demanda boliviana. Sin embargo, el implicado apeló la decisión y el nuevo proceso podría durar entre cinco y seis meses.
«De acuerdo con las investigaciones que se han hecho, es pieza clave porque él era prácticamente el cajero, el que financiaba, el que pagó algunos pasajes para que vengan los mercenarios extranjeros a nuestro país. El hecho de que llegue a Bolivia puede ser muy esclarecedor, porque pueden probar algunos elementos”, remarcó.