Cochabamba. Peritos del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), representantes de la Policía y la Fiscalía, abogados y los dos imputados por el asesinato de la campeona nacional de taekwondo Gloria Adriázola y la farmacéutica Peggy, participaron ayer de una nueva inspección a la casa de Villa Busch donde ocurrió el horrendo crimen, para aplicar pruebas científicas que ayuden a dilucidar lo sucedido e identificar plenamente a los asesinos.
Omar dice que sueña con sus hermanas que ayudó a matar
Afirma que sus noches son “hermosas”.
ERBOL, Bolivia
“Hermosas”, así calificó Omar Adriázola sus noches tras el doble asesinato de sus hermanas Gloria y Peggy. Él confesó haber participado en la muerte violenta de sus seres queridos, a quienes ahora ve en sus sueños.
“(Mis noches son) “hermosas”, porque sueño con mis hermanas, mi familia y sueño con mi vida anterior, pero al despertar veo la realidad”, dijo, según reporte de radio Pío XII de la Red ERBOL.
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Según su abogado, Jorge Calvo, el 13 de mayo, Omar y su exnovia, Alejandra Ariana Saavedra, pretendieron robar dinero de su familia. Para aquello, intentaron dopar a sus hermanas.
En intento terminó mal. Omar se enfrentó con su hermana Gloria, quien era taekwondista con un nivel internacional. Él la golpeó dejándola grogui. Entonces, según su versión, Alejandra la acuchilló y después hizo los mismo con Peggy, quien tenía capacidades diferentes.
“No hay día, no hay noche en la que no me arrepiente”, lamentó el joven.
Omar admitió su participación, pero aseguró que él no mató a sus familiares y pidió que la persona responsable sea encarcelada. “Quiero que se haga justicia. Dios sabe”, insistió.
“De manera inconsciente, influenciada he cometido un error. Bien, yo me hago responsable de ello, pero la persona, que ha matado a mis hermanas, no quiera escapar, no quiera salirse así”, agregó.
Aplican luminol, Alejandra y Omar se culpan uno al otro
Caso taekwondistas.
OPINIÓN, Cochabamba
LOS PERITOS ENTRAN A LA ESCENA DEL CRIMEN. DICO SOLÍS
Peritos del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), representantes de la Policía y la Fiscalía, abogados y los dos imputados por el asesinato de la campeona nacional de taekwondo Gloria Adriázola y la farmacéutica Peggy, participaron ayer de una nueva inspección a la casa de Villa Busch donde ocurrió el horrendo crimen, para aplicar pruebas científicas que ayuden a dilucidar lo sucedido e identificar plenamente a los asesinos.
Los peritos aplicaron Luminol, que es un derivado del ácido ftálico, que es la reacción química más indicada para la localización de manchas de sangre no visibles al ojo humano y que pudieron ser limpiadas. La forma en la que la sangre salpicó en el piso, paredes y otros objetos ayuda a establecer la estatura del criminal, si apuñaló de izquierda a derecha, de arriba a abajo y otros detalles para identificar a los sospechosos.
La inspección comenzó en la tarde y se extendió hasta horas de la noche porque el químico fue aplicado en varias habitaciones. Tanto Alejandra como Omar acudieron a la inspección para guiar a los peritos a los espacios donde supuestamente ocurrieron los asesinatos y convencer, cada uno, de su versión de que el otro es el culpable.
Omar, dentro de un bus de Régimen Penitenciario, accedió a hablar. A la Red ATB le dijo: “No es cierto que ella llegó pasada la medianoche, estaba en mi casa desde las 8 y media o 9, si yo fuí partícipe por permitir su entrada y algunas otras cosas, yo ya lo dije, yo no soy ningún asesino, yo no he clavado ningún puñal a nadie, yo no he derramado sangre alguna. Si tengo que pagar por haberme equivocado, lo voy a hacer, pero esa persona que ha matado a mis hermanas, no puede salirse así”.
A la Red Bolivisión le dijo que en la cárcel la pasa mal, que en las noches sueña que sus hermanas están vivas, pero que su despertar es terrible porque se da cuenta que no están. Acotó que en el video de la veterinaria se puede advertir su “ingenuidad” al pedir los sedantes y que su madre jamás lo encubriría porque los educó “de forma correcta”.
Opuestas.
Las declaraciones de Alejandra y Omar no son uniformes. Ella hizo dos distintas y él ya dio tres. Son las pruebas científicas las que exhibirán a los culpables.
DENTRO DE LA CASA RECOGEN EVIDENCIAS. DICO SOLÍS