La ‘U’ Cruceña triunfa y se instala en las semifinales

Libobasquet. Es su segunda final consecutiva. Juega el miércoles en Santa Cruz contra La Salle. Vikingos y San Simón disputan un lugar en la gran final.
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Ref. Fotografia: ‘Soberbiamente’. Wendell no dudó a la hora de clavar el balón. El pívot fue uno de los más destacados del encuentro.

Santa Cruz tiene un espacio en las semifinales de la Liga Boliviana de Básquet; la «U» Cruceña venció por 69 a 61 a Amistad de Sucre en el partido de vuelta por los cuartos de final y se metió entre los mejores cuatro. El miércoles (20:00) recibirá a La Salle en el Gilberto Pareja  en busca del pase a la final.  Vinkingos de Tarija y San Simón de Cochabamba protagonizarán el otro duelo.De igual a igual. Se suponía que el partido sería parejo y que los capitalinos, que llegaban con desventaja, iban a salir con todo. Nada más cerca a la realidad. Encabezados por los estadounidenses Darnell Evans y Fredriks Wodss le complicaron las cosas a la «U». Lewis Wendell se encargó de abrir el marcador casi al minuto de juego y con ello comenzaba la arremetida cruceña. El estratega Mario Beramendi paró en cancha a Wendell, Marco Recamo, Joaquín Baeza y a Rodrigo y Paolo Ramos. El quinteto no duró mucho, pues la presión del rival y las faltas constantes hicieron echar mano de la banca de suplentes; Mauricio Landívar por Recamo y el argentino Carlos Paredes por Wendell. Por segunda vez funcionó, no desentonaron. Los doctos acabaron ganando el primer cuarto 22 a 17.

Mientras el partido se desarrollaba, se observaba que se tornaba agresivo. Un disimulado golpe por acá, otro por allá, en momentos con la venia arbitral, hacían que se eleve la tensión y el reclamo del público. Para el segundo cuarto, Amistad salió más confiado y comenzó a atacar, era el minuto 7 e igualaron el marcador 22-22.



El balón iba y venía y ambos equipos fallaron en su intento de ampliar el score. No fue hasta pasado los cinco minutos que Wendell roba un balón en mitad del terreno y, con la mirada  en el aro, clava soberbiamente el balón decretando así el 24-22. De ahí en adelante todo fue para la «U». Se encendió Paredes y pelota que lanzaba era punto seguro, mientras que los hermanos Ramos sobresalían en asistencias y  marca. Un contundente 40 a 28 ya profetizaba un lugar en la “semi”.

El tercer cuarto fue cerrado y duro. La lectura de Beramendi fue clara; dejó a Baeza y a los Ramos adelante (aleros y base), mientras que Recamo y Paredes se quedaron atrás. Con Paredes en esa posición —normalmente juega de alero— tuvo más salida en los contragolpes y se adelantó en los puntos (59-44). El final fue electrizante. Si no fuera que los dos planteles no estaban finos en la puntería, prueba de ello es el resultado, la ventaja hubiera sido mínima. 60 a 57 se leía en el tablero, hasta que Rodrigo recibió el balón, lanzó y los tres puntos desmoronaron el ataque del rival, elevaron los ánimos del local, que selló la victoria con un 69 a 61 a su favor.

Punto de vistaMario FloresEntrenador de Baloncesto«Los jugadores están en su mejor momento’La fortaleza de la «U» fue la buena rotación de su plantel, destacó el trabajo de Wendell y los Ramos.Amistad fue poco efectivo en los tiros libres y en los lanzamientos de media distancia, que normalmente son su fuerte. Universidad rotó casi toda la banca, haciendo un partido parejo, eso demuestra que los jugadores están en su mejor momento. Al finalizar el primer cuarto ya se podía avizorar y por las cosas que habían mostrado una victoria cruceña.Fuente: El Día