El ministro de la presidencia Juan Ramón Quintana, el mismo que quería enviar al ex prefecto Leopoldo Fernández “a convivir con los gusanos”, acaba de lanzar un ataque contra el padre Mateo por su campaña para lograr un mínimo de 10% de presupuesto estatal para la salud.Cabe preguntarse cuáles son los motivos del burócrata, cuando Bolivia se encuentra a las puertas de una visita del Papa Francisco.¿Se busca deliberadamente un cortocircuito con la Iglesia Católica o solamente estamos ante un caso de extrema torpeza?Según Quintana, el padre Mateo estaría “condenando a la muerte a los bolivianos” al pedir el 10%, cuando de acuerdo a las cifras que maneja el funcionario Bolivia destinaría un 11,5% al rubro sanitario.Examinadas las estadísticas presupuestarias, parece más bien que el Ministro de la Presidencia ha hecho malabares aritméticos, reuniendo los presupuestos de salud, educación y deportes para llegar al número antes citado…[email protected]