Así lo explicó el director Ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia en México, Juan Martin Pérez.
Considera que debe existir libertad de información.
Foto: Los Tiempos. ERBOL, La Paz
Los medios privados en Latinoamérica y en el caso particular de Bolivia, que se encuentren asfixiados económicamente por el Gobierno por tema de publicidad, tienen la posibilidad de presentar una denuncia ante la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión, dependiente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Así lo explicó el director Ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia en México, Juan Martin Pérez, quien además considera que el Gobierno no debe “castigar” a algunos medios con negarse contratos de publicidad con el fin de “asfixiarlos económicamente”, sólo porque cumplen con un trabajo crítico e investigan denuncias, hechos de corrupción y otras irregularidades que implican a las autoridades de turno. “Esta es una grave violación a los derechos humanos de la población porque los medios de comunicación son sólo como su semántica, un canal, una oportunidad para que a través de ellos llegue la información. El derecho a la información es poder acceder a una información diversa”, afirmó Pérez, en entrevista con ERBOL. Explicó que la Relatoría Especial de la Libertad de Expresión recibe constantes denuncias de medios de comunicación de países latinoamericanos, que afirman que su Gobierno les niega la publicidad y que a través de esa acción intentan que el medio cambie su línea editorial crítica. “Todo país tiene la libertad y posibilidad de denunciar, Bolivia lo puede hacer, porque todos los países que han firmado la Convención Americana de Derechos Humanos tienen jurisprudencia o vínculo jurídico con las determinaciones de la CIDH (…) sucede que en otros países las tribus políticas se están apropiando de los aparatos del Estado para sus propios beneficios (…) Es una mala señal si el Estado boliviano está haciendo esto y puede ir creciendo al punto de tener exilios de periodistas o asesinatos. Si permitimos como bolivianos que les callen las voces, que les cierren los micrófonos, cuando se quiera denunciar algo no habrá micrófonos para ser escuchados”, aseveró. Finalmente dijo que el Estado boliviano está obligado a garantizar la libertad de expresión y de información. “En México, el Gobierno hizo una presión y un acuerdo político y le cerraron la puerta con la empresa radiodifusora que transmitía el programa de la comunicadora Carmen Aristegui, que era una periodista muy crítica. La empresa de la radiodifusora estaba en negocios con una empresa de Internet, así que le cerraron el programa, entonces no se debe permitir que esto pase en Bolivia”, concluyó. El pasado 24 de julio, el presidente Evo Morales tuvo un breve encuentro con un periodista de ERBOL después de varios años. Cuando un reportero quiso hacerle una consulta sobre un proyecto gubernamental, el Mandatario se negó a responder y afirmó: “No, no, no comparto contigo, no comparto contigo con la forma que hacen el periodismo”.