Chile afirma que está listo para ir al fondo del juicio

Bulnes desaconseja a su país abandonar el Pacto de Bogotá de 1948.



Chile. Bachelet con los expresidentes Sebastián Piñera y Ricardo Lagos.

Chile. Bachelet con los expresidentes Sebastián Piñera y Ricardo Lagos. EFE.

La Razón  / La Paz 

El fallo que emitirá hoy la Corte Internacional de Justicia (CIJ) será recibido en Chile con serenidad, según anticiparon las principales autoridades de ese país, quienes aseguraron que están listos para debatir el fondo de la demanda planteada por Bolivia en 2013.

La presidenta chilena, Michelle Bachelet, afirmó ayer en Santiago que su país se encuentra preparado para “para cualquier escenario”, luego de sostener una reunión con el equipo de expresidentes que la asesora en esta temática. La Mandataria instó a los ciudadanos de su país a recibir el fallo con tranquilidad, tras asegurar que existe unidad frente a la acción jurídica iniciada por Bolivia.

MENSAJES. “Esperamos con confianza en nuestros argumentos. Ya sea ahora o más adelante estamos preparados para todos los escenarios”, insistió Bachelet en una rueda de prensa tras el encuentro con sus antecesores.

En este mismo escenario el expresidente chileno Eduardo Frei aseguró que su país “no cederá territorio”, un mensaje en el que ya había insistido el canciller Heraldo Muñoz, quien señaló que el asunto de hoy solo es de procedimiento que no afectará la integridad territorial de su nación.

En La Haya, sede de la CIJ, el agente chileno, Felipe Bulnes, en un contacto con medios bolivianos y chilenos, dijo que no será aconsejable el abandono del juicio en caso de un fallo adverso, arguyendo la contundencia de sus argumentos para asistir al proceso. “Respecto del fondo del juicio, que es lo que seguiría el día de mañana (hoy) si es que el fallo fuera adverso, transmitir tranquilidad y convicción”, declaró a medios chilenos, según refleja en su edición digital La Tercera.

Bulnes remarcó que será “claramente desaconsejable” para su país abandonar el Pacto de Bogotá de 1948, la norma por la que los países de América Latina reconocen la potestad de la CIJ. “Tenemos toda la tranquilidad de que, si tenemos que ir al fondo, vamos a demostrar con claridad que la causa boliviana no tiene los fundamentos básicos para que pueda ser acogida”, puntualizó.

“Siempre hemos dicho que la demanda boliviana, por mucho que ahora estemos discutiendo un tema procesal sobre la competencia de los jueces, tergiversa lo que ha sido la historia de los intercambios diplomáticos entre ambos países y confunde lo que son aspiraciones con derechos”, agregó.

Chile llevó adelante una campaña para mostrar a la comunidad internacional que Bolivia plantea desconocer el Tratado de 1904, el pacto por el que se fijaron las fronteras con Bolivia. De hecho, fundamentó esta hipótesis con un legajo de cerca de 2.000 páginas con las que pidió a la CIJ inhibirse de conocer este caso. Bolivia aseguró que no planteó la revisión de este tratado y defendió la potestad del alto tribunal.