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Los policías ayer cometieron excesos al reprimir de forma violenta a los pobladores de Caracollo, especialmente niños y ancianos, los que pese al pedido de la gente de que dejen de gasificar cerca a la escuela continuaron con su acometida.
Los policías llegados de la ciudad de La Paz, se asentaron en el sector del edificio policial de Caracollo ubicado al lado de la carretera antigua hacia la sede de gobierno, y se enfrentaron con un grupo reducido de comunarios, a los que lanzaban gases y también les dispararon balines, celebrando cada vez que «daban en el blanco».Luego de unos minutos, un padre de familia les pidió que dejaran de lanzar los gases, porque los estudiantes estaban siendo afectados, sin embargo, los policías reaccionaron de forma violenta, queriendo golpear al progenitor, pero, al ver que había periodistas que estaban grabando lo que pasaba, se tranquilizaron y lo dejaron.En la unidad educativa Litoral los niños estaban en su actividad de lavado de manos, pero en ese momento tres granadas de gas estallaron al establecimiento provocando el pavor de los niños y jóvenes, que no sabían hacia dónde huir.Más tarde, los policías hicieron una «tregua» para que los estudiantes pudieran salir de su unidad educativa, y un grupo logró hacerlo, pero los policías los usaron como un «escudo humano», para continuar con la represión, y es cuando el intendente del pueblo, Mario Córdova, quien pedía a los niños tener cuidado por la gasificación, fue sorprendido por los policías y entre varios lo redujeron y comenzaron a golpearlo y patearlo en el piso. Córdova una persona de avanzada edad, desmayado por la brutal golpiza fue arrastrado por los mismos uniformados, hasta ambientes de la Policía, y lo metieron a empujones.Pero a los pocos segundos nuevamente fue sacado y subido a rastras a una ambulancia, como si fuera un «bulto» e incluso le cerraron la puerta en su pie, luego lo trasladaron hasta el hospital «San Andrés» de Caracollo.»He salido de la federación, les estaba diciendo a los niños que tengan cuidado porque estaban gasificando y desperté en el hospital, me han pegado, me han pateado en la cara y me desmayé. Estoy todo adolorido, por las patadas», manifestó Córdova.Los estudiantes lloraban, gritaban, corrían, muchos solos y otros junto a sus padres o madres que los fueron a rescatar, pero una vez conocido este abuso, la población reaccionó y comenzó a reunirse cerca del edificio de la Policía Provincial. Las madres totalmente indignadas por lo ocurrido, apoyadas por los demás, echaron del sector a todos los uniformados, quienes subiendo a sus movilidades se replegaron en el sector Norte, donde inicia la población.HERIDOSLos heridos comenzaron a llegar al hospital «San Andrés», desde las 10:00 horas; informó el médico de turno, Luis Cáceres. Fueron cinco personas, de las que una fue trasladada a la ciudad de Oruro, pues por la intoxicación del gas no podía reaccionar.Varios presentaban heridas de balín en la cabeza y pies, por lo que tuvieron que realizarles suturas. Se atendieron niños con irritación en los ojos, que no podían respirar, por el gas.DEFENSORÍALa representante de la Defensoría del Pueblo, Clotilde Calancha, estuvo presente en el lugar y expresó su preocupación por la violencia registrada, asegurando que hará una petición de informe sobre los hechos, además de una representación, porque no se puede permitir que los funcionarios del Estado, como los policías comentan excesos, menos en contra de los niños y adultos mayores.
Fuente: Cadena A, La Patria