Cátedra en Alemania

penoco_thumb

El refrán dice que “no hay que hablar de soga en la casa del ahorcado” y al presidente Morales se le ocurrió mencionar un tema muy doloroso para los alemanes cuando los periodistas le preguntaron acerca de la “re-re-reelección” durante una conferencia en la Universidad de Berlín.



El Primer Mandatario dijo que la continuidad es buena para los países, porque permite que se crezca y se progrese como lo ha hecho Alemania. El tema es que el crecimiento actual de Alemania no es precisamente gracias a la “continuidad” de la que habla el jefe de estado, sino porque después de 1945, los alemanes decidieron ponerle la mayor cantidad de candados a cualquier intento por vulnerar el orden democrático en el país y bloquear la acción de aventureros como los que siguen acosando en otras naciones europeas como Grecia, Francia, España e Italia, donde surgen algunas posturas radicales, especialmente populistas y de extrema derecha.

Después de lo ocurrido entre 1933 y 1945, cuando a Hitler se le ocurrió fundar un régimen de “alta continuidad” como el Tercer Reich, que pretendía imponerse durante mil años, los alemanes no quieren saber absolutamente nada de este tipo de “re-re-re” y justamente han descubierto que el camino opuesto, el de la democracia y el respeto a las leyes ha sido el mejor.

Fuente: eldia.com.bo