TENNA es la certificación china que permite que podamos conocer los siguientes smartphones que llegarán pronto y que serán colocados apropiadamente en las vitrinas de los centros comerciales donde esperan engatusar a los miles de viandantes que pasan por delante de esos cristales.
Ahora ha sido el sucesor del Galaxy A7 el que ha pasado por esta agencia de regulación para presentarse como un terminal que, entre algunas características, llama la atención su pantalla de 5,5 pulgadas 1080p, una memoria RAM de 3GB y un chip Snapdragon quad-core a 1.5 GHz de Qualcomm. Un terminal que es de las bazas por parte del fabricante coreano para enfrentarse a ese ejercito de teléfonos chinos que están consiguiendo tambalear el mercado de smartphones en todo el planeta.
Las especificaciones del nuevo Galaxy A7 incluyen a una pantalla de 5,5 pulgadas Super AMOLED con resolución 1080 x 1920 FHD. El chip que ofrece todo el potencial de proceso es un Qualcomm Snapdragon 615 con una CPU quad-core a una velocidad de reloj a 1.5 GHz y una gráfica Adreno 405. En la memoria RAM podemos contar con una de 3 GB, un aumento considerable en lo que fue el anterior A7.
Para la memoria interna pasamos a 16 GB y la posibilidad que se le ofrece al usuario, descontento con esa gama alta que obvia esta funcionalidad, al poder aumentarla hasta los 128 GB a través de una tarjeta microSD.
Por el lado de la fotografía una cámara trasera de 13 MP y en la frontal una de 5 MP para realizar esas selfies de moda. La batería es de 2.600 mAh y Android 5.1.1 es la versión del software. Ofrece soporte a redes 4G LTE (Cat.4) y lo normal en este tipo de smartphones con Wi-Fi, Bluetooth 4.0, NFC, USB 2.0, GPS y NFC. Esta segunda generación tiene un grosor de 6,95 mm y un peso de 155 gramos.
Un sucesor del A7 que volverá a complicarle las cosas al usuario que esté optando por alguna de esas marcas chinas o alguno de estos teléfonos de la serie A que implica más coste pero que da acceso a las calidades que ofrece Samsung.
Fuente: actualidadgadget.com