JON MACKLIN, EN UNA DE SUS JUGADAS ESTELARES DE ANOCHE.
En un choque atrapante que se definió en los últimos cinco minutos, que tuvo vaivenes en el ritmo en ambos lados y en el que el quillacolleño Diego el Choco Olguín se consagró como figura indiscutible, el conjunto de San Simón selló anoche su victoria frente a Vikingos (90-76), por el segundo partido de la final de la Liga Boliviana de Basquetbol (Libobasquet)
Con ese resultado, el elenco cochabambino está a un paso de proclamarse campeón de la cuarta edición liguera. Para ello necesita volver a marcar su localía esta noche, a las 20:30, también en el Gróver Suárez
Fue un encuentro sumamente ajustado, no solo en el marcador, sino también en el ambiente porque el público no cabía en el coliseo. A ello se le sumaron los ánimos caldeados del plantel tarijeño, que pese a haberse parado con la etiqueta de campeón actual, no fue superior en juego que los simones
El primer cuarto acabó muy parejo (24-22, en favor del anfitrión). En el segundo parcial, San Simón amplió su ventaja (45-39). Sin embargo, el tercer chico volvió a emparejar las fuerzas (69-62). Cuando pareció que los universitarios iban a dejar escapar nuevamente la victoria en la recta final, todo cambió. Una inyección de energía se apoderó del quinteto del valle y el triunfo fue implacable (90-76). Mucho tuvieron que ver el Choco Olguín y la sociedad creada entre los norteamericanos Petty y Jon Macklin. El quillacolleño, rey de los triples en la noche, convirtió uno de los más determinantes, justo cuando el partido se ponía más tenso
San Simón tiene hoy la chance de definir todo en casa. Necesita volver a mostrar de qué está hecho para robarle la corona a Vikingos y quitarse a sí mismo la espina que tiene clavada desde el torneo pasado, cuando el cuadro chapaco lo dejó fuera de juego.
Fuente: opinion.com.bo